Microteatro para no olvidar: 12 obras que visibilizan las enfermedades tropicales

En una cama diminuta arrinconada en una habitación lúgubre de 15 metros cuadrados, una mujer enferma alterna la tos con los quejidos. No se ve más que su espalda porque tiene el rostro vuelto contra la pared. Un toldo la protege de los mosquitos. Cuando se incorpora en su lecho, muestra sus muñecas vendadas hasta la punta de los dedos, de tal forma que no parece tenerlos, sino que su mano terminara como si fuera de palo.

Este personaje de la obra Négatif sufre de lepra, una de las 20 enfermedades tropicales desatendidas que hoy padecen más de 1.600 millones de personas en el mundo. Una cifra que, un año más, ha querido sacar del olvido la Fundación Anesvad, que este martes ha inaugurado en Madrid la décima edición del ciclo de microteatro Nazcas donde nazcas. Derecho a la salud, para concienciar sobre estos males y la importancia del acceso universal a la atención sanitaria.

La muestra, compuesta por 12 obras, busca sensibilizar a los espectadores sobre las secuelas físicas y psicológicas que sufre la población de las zonas tropicales que padece afecciones cutáneas como la úlcera de Buruli, la lepra, el pian (que afecta los rostros y deforma las piernas de los enfermos, la mayoría niños) o la filariasis linfática (una enfermedad parasitaria transmitida por mosquitos, conocida como el mal de la pata de elefante). Estas enfermedades, si bien rara vez son mortales, “envuelven a quienes las padecen en una espiral de pobreza y falta de salud que les impide salir adelante”, ha explicado Paula Paunero, técnica de educación para la transformación social de Anesvad, que trabaja desde hace más de 50 años para garantizar el acceso a la salud en los países empobrecidos.

En algunas zonas de África el desconocimiento de las enfermedades tropicales deriva en estigma para quienes las padecen. Paunera señala que “se cree muchas veces que es una brujería o mal de ojo”. Para combatir esta desinformación, las misiones de Anesvad en este continente ofrecen tratamiento a los enfermos, al tiempo que la organización realiza campañas de sensibilización a la población sobre las causas y consecuencias de estas afecciones. Una labor que “es mucho más difícil que hacer un diagnóstico”, asegura Paunera.

Las obras de teatro tienen una duración aproximada de 15 minutos y se desarrollan en salas pequeñas de tres metros de largo por tres de ancho. Los espectadores forman parte de algunas escenas y los actores están al alcance de la mano, lo que construye una atmósfera íntima que favorece la empatía y la sensibilidad con el tema.

El ciclo ha comenzado este 26 de septiembre y se prolongará hasta al 8 de octubre en el espacio Microteatro de Madrid. Las entradas tienen un precio de cinco euros ―con un descuento por la compra de paquetes para varias funciones― y se pueden adquirir en la web de Microteatro.

Las obras continuarán su gira en Bilbao, por segundo año consecutivo, como parte del festival Fair Saturday, del 24 al 26 de noviembre. Y también se ofrecerán representaciones en Barcelona y Santiago de Compostela.

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