La UE condena el “abuso de poder” de la policía en la muerte de George Floyd

Con las calles de Estados Unidos inflamadas por la muerte de George Floyd en una brutal detención policial, Bruselas envía un mensaje de condena, comprensión y calma. El alto representante para la Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, ha advertido este martes de que no se pueden ignorar los desmanes de los responsables de mantener la seguridad. “Todas las sociedades tienen que prestar atención al uso excesivo de fuerza policial”, instó. Junto a esa apreciación general, no eludió comentar el caso concreto de la salvaje muerte de Floyd tras ser arrestado en Minneapolis. “Es un abuso de poder. Eso hay que denunciarlo y hay que luchar contra esta situación en EE UU y en el mundo entero”, reclamó.

El poder amplificador de las redes sociales, utilizando como gasolina la dura imagen de la rodilla del policía blanco Dereck Chauvin clavada en el cuello del ciudadano afroamericano desarmado que clamaba que no podía respirar, han convertido un suceso que en otras circunstancias podía haber quedado reducido al ámbito local en una crítica al racismo en las fuerzas de seguridad cuyos ecos han llegado hasta Bruselas. “Europa, como el pueblo de EE UU, está en shock”, afirmó el también vicepresidente de la Comisión Europea.

Mientras el presidente estadounidense, Donald Trump, amenaza con desplegar el Ejército para combatir los disturbios callejeros, Borrell llamó a una desescalada de la tensión. El dirigente español evitó criticar directamente la agresividad con la que Trump ha respondido a las movilizaciones, a las que ha acusado de representar un “terrorismo nacional”, pero defendió las manifestaciones. “Apoyamos el derecho a la protesta pacífica y condenamos la violencia y el racismo de cualquier tipo. Todas las vidas importan. Las vidas [de las personas] negras importan", aseguró repitiendo uno de los lemas (Black lives matter) utilizados en las protestas.

Presupuesto exterior

Borrell se expresó en esos términos durante la rueda de prensa dedicada a la propuesta de Bruselas de reforzar el presupuesto 2021-2027 para la acción exterior. La Comisión quiere que se eleve en 16.500 millones de euros la cantidad lanzada por el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en febrero. De ellos, 10.500 millones irían destinados a políticas de cooperación, desarrollo y vecindad, y los 5.000 restantes a ayuda humanitaria. En total, el Ejecutivo comunitario cuenta con nutrir la partida exterior con 118.500 millones.

Con las consecuencias económicas de la pandemia abocando a las economías a la recesión, la UE prestará especial atención a la situación en África y los Balcanes Occidentales para evitar en lo posible que el multimillonario estímulo que prepara la UE a nivel interno aumente las desigualdades con los países vecinos, dotados de una potencia de fuego económica muy inferior para afrontar la crisis derivada del virus.