Bolivia considera que un anuncio de tele chileno discrimina a su presidente
El anuncio muestra de espaldas a un actor parecido a Morales en el palacio de La Paz y viste el calzado típico de los campesinos pobres
El gobierno de Bolivia protestó ante su similar de Chile y le pidió tomar acciones contra la empresa de telecomunicaciones Word of Mouth (WOM), que publicó un comercial que satiriza al presidente Morales. La Cancillería boliviana considera el vídeo racista y por tanto contrario a la convención internacional contra la discriminación firmada por Chile.
El anuncio muestra de espaldas a un actor parecido a Morales, quien está a punto de salir de lo que intenta ser una representación del palacio de gobierno de La Paz. Afuera del mismo, espera un grupo de periodistas. El actor viste "abarcas", el calzado típico de los campesinos pobres bolivianos y, de pie ante un cuadro de veleros del siglo XIX, recibe por teléfono la instrucción de un asesor de "no llevar la zampoña", el instrumento musical de los indígenas del occidente de Bolivia. Al salir del palacio, el actor se encuentra con los periodistas, a los que acusa de "no ser prensa chilena", sino "espías del Estado chileno", parafraseando un dicho auténtico que el presidente Morales expresó en mayo, cuando fue abordado por periodistas chilenos que viajaron a La Paz a cubrir el inicio de los alegatos de Bolivia y Chile ante la Corte Internacional de la Haya en torno al diferendo marítimo de ambos países. La publicidad cierra con la frase "si tu también tienes problemas para navegar" y la oferta de un servicio de transmisión de datos. Este final alude a la mediterraneidad de Bolivia, que este país sufre desde la guerra del Pacífico ganada por Chile a Bolivia y Perú a fines del siglo XIX.
Con este comercial, la compañía WOM continua una campaña publicitaria con referencias políticas, que comenzó con una sátira al presidente Maduro y su célebre afirmación de que había hablado con un pajarito.
En Bolivia la oposición se sumó a la condena del comercial que se burla "del presidente de todos los bolivianos". El más elocuente sobre este tema fue el ex presidente derechista Jorge Quiroga, que hace poco fue incorporado al equipo de personalidades que se encarga de difundir la posición boliviana sobre el conflicto con Chile.
Luego de seis años de una aproximación sin precedentes, que coincidió con el primer gobierno de Michelle Bachelet, Evo Morales rompió el diálogo con Santiago, que calificó de "un engaño" e inició una campaña para lograr negociaciones con plazo fijo y supervisión internacional sobre un acceso soberano de Bolivia al mar. Un primer esfuerzo en ese sentido fue la demanda ante la Corte Internacional. Uno más reciente, su esfuerzo por involucrar al papa Francisco en el asunto, pidiendo que este avale que el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países -que es exigida por La Moneda- permita resolver la cuestión marítima en cinco años. Chile rechazó la iniciativa, pues quiere relaciones "sin condiciones". Hasta ahora el gobierno de Bachelet no se ha pronunciado sobre el anuncio que molestó al gobierno boliviano.
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