Ley seca: sólo podrá comprar alcohol durante las elecciones si está en el DF

En México está prohibido vender alcohol durante las elecciones. Ni el día antes y ni durante la jornada de votación. Es una de las particularidades de la legislación electoral, que lleva décadas imponiéndose, y que busca evitar que las pasiones que provocan las filias políticas se desbosquen a lomos de una botella de tequila o un whisky doble. Son también parte de la tradición, las quejas y los intentos de los comercios por encontrar alguna grieta que les permita no cerrar sus negocios durante esos dos días, que además suelen coincidir con fines de semana. Eso es lo que han conseguido los restaurantes y hoteles del Distrito Federal, la capital del país, de cara a las elecciones intermedias del próximo domingo siete de junio. Podrán vender bebidas alcohólica, pero con condiciones: sólo vale si acompaña a alguna comida; y las botellas han de servirse ya abiertas.

La excepción se ha logrado gracias a mediación de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) ante la Secretaría de Gobernación del de la capital. “La ley da potestad a los municipios para que apliquen no o la prohibición. En el caso del DF, tuvimos un acto de concertación con ellos y les explicamos las razones del perjuicio que ocasiona. A partir de ahí, hemos empezado a recibir llamadas de otros muchas partes de la república para que les explicáramos como los habíamos hecho”, explica el presidente ejecutivo de Canirac, José Luís Mier.

En la capital hay 52.193 establecimientos de preparación de alimentos

El arsenal de motivos que presentó sobre la mesa la patronal de hosteleros incluye: 52.193 establecimientos de preparación de alimentos. La gran mayoría pequeñas empresas, pero también 7.000 restaurantes clasificados como de interés turístico, incluyendo hoteles y restaurantes. Un sector que aporta 33% del PIB turístico nacional y que aporta 180.000 empleos directos. Las pérdidas estimadas rondan los 120.000 millones de pesos .

El Gobierno capitalino ha reculado así con la restricción –sólo para restaurantes y hoteles, la excepción no bares, cantinas, discotecas, salas de baile, supermeracados, tiendas de autoservicio, etc- que publicó en la Gaceta Oficial del Distrito Federal el pasado miércoles, donde establecía el toque de queda desde las primeras horas de este sábado y hasta las 23:59 horas del domingo. "Es una razón natural. Va a haber futbol y obviamente, si dejamos a los restaurantes con que vendan bebidas, no faltará que alguien en estado etílico salga a querer votar. Y la ley es exacta en eso, en evitar a quién escandalice y demás”, explicó entonces el secretario de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano.

Este fin de semana se juegan dos partidos de futbol de mucho tirón en México. El sábado, la final de la Champions League, entre Barcelona y Juventus. El domingo, el día de las de la votación para renovar la Cámara de diputados, más de 1.000 alcaldías en 16 Estados y nueve gobernadores, la selección mexicana jugará un partido amistoso contra Brasil. Quién no esté el DF y quiera salir, seguirá las carreras detrás del balón con un zumo o un vaso de agua.