Brasil veta la entrada a un polémico ‘profesor’ de técnicas de seducción

Julien Blanc no podrá arrinconar a mujeres en discotecas, ni besarlas por sorpresa, ni agarrar la cabeza de una desconocida en alguna discoteca de Brasil y colocarla en su entrepierna. El ministerio de Exteriores ha anunciado este jueves que denegará el permiso para entrar al país a este suizo, miembro de una polémica red de instructores de ligue acusada con frecuencia de acosar e intimidar mujeres.

El profesor no había pedido todavía un visado para los dos talleres que iba a impartir en enero en Florianópolis y Río de Janeiro, pero en solo dos días más de 300.000 personas se han unido a una petición en línea para que se le prohíba la entrada argumentando que sus tácticas "exaltan la cultura de la violación, delitos de agresión emocional y física contra las mujeres, el racismo y un profundo desprecio por las mujeres". En noviembre, Blanc fue expulsado de Australia después de otra campaña en Internet.

De acuerdo con las tarifas publicadas en la web de su empresa, Real Social Dynamics, Blanc iba a cobrar entre 2.000 y 2.500 dólares a cada asistente al curso de tres días para enseñarle los secretos sobre la "subcomunicación a la que responden las mujeres". Estos talleres suelen combinar teoría con mucha práctica: los participantes intentan conocer chicas en bares, en centros comerciales o en la calle bajo la supervisión de estos instructores, que les muestran cómo "leer el lenguaje corporal de las mujeres", "hablar durante horas" o "jugar a ser duro de conseguir". Resulta menos inocente de lo que parece: en varios vídeos, Blanc y otros "pick up artists" (artistas del ligue, como se denominan a sí mismos) se aproximan de manera agresiva a desconocidas, las insultan o las agarran con brusquedad. En una conferencia, Blanc dice: "En Tokio, al menos, si eres un hombre blanco puedes hacer lo que quieres".

"En caso de que cualquier embajada o consulado en el exterior reciba una solicitud de visado, existen elementos suficientes que recomiendan la denegación", ha anunciado el Ministerio brasileño de Exteriores en un comunicado. La Secretaría de Políticas para las Mujeres ha subrayado en otro texto que rechaza "cualquier estrategia e instrumento que incentiven la violencia contra las mujeres (...), aún más en este momento, en el que el Anuario Brasileño de Seguridad Pública acaba de estimar que más de 143.000 mujeres fueron violadas en 2013 en Brasil".