La huelga agraria se reactiva en Colombia al borde de las elecciones
Grupos de campesinos lanzan un nuevo paro argumentando que el Gobierno no ha cumplido sus compromisos con el campo
El gobierno de Juan Manuel Santos no ha logrado detener la huelga nacional anunciada hace más de un mes por algunos sectores campesinos que participaron entre agosto y septiembre de 2013 en las manifestaciones que ocasionaron el bloqueo de numerosas vías del país, lo que se convirtió en la peor crisis social que ha tenido que enfrentar el presidente colombiano y en un bajonazo para su popularidad.
Ahora, a punto de terminar su mandato y en medio de la campaña por la reelección, los líderes de las protestas alegan que el gobierno de Santos no ha cumplido con los acuerdos a los que se comprometió en 2013 y que en ese momento pusieron fin a las manifestaciones.
Aun así, hasta último minuto del domingo, Santos insistió en que el paro era innecesario, aduciendo que nunca antes se ha invertido en el sector agropecuario como ahora. “Yo diría que no hay ninguna justificación en este momento para un paro”, dijo el mandatario desde Ibagué, una pequeña ciudad a unos 200 kilómetros al sur de Bogotá. Según el presidente, solo los cafeteros han recibido $6.8 billones de pesos. “Eso es una cifra descomunal, nunca antes el sector cafetero había recibido del Gobierno tanta plata", agregó.
El sector conocido como Dignidades Agropecuarias, liderado por el campesino César Pachón, quien es además vocero de los cultivadores de patata, ha convocado a varios productores para reclamar por lo que consideran una falta de palabra para solucionar los problemas del campo. “Los altos costos de insumos, combustibles, abonos y plaguicidas, la irrupción de la minería y el daño al medioambiente, las deudas con la banca pública y privada [piden un tratamiento especial], y [la afectación] de los tratados de libre comercio no fueron atendidos”, dijo hace unos días el líder en una cara a cara con el ministro de Agricultura, Rubén Darío Lizarralde, que se transmitió en una emisora de Boyacá, el departamento que en 2013 protagonizó las mayores concentraciones campesinas y que hoy permanece militarizado para evitar bloqueos en las carreteras.
El presidente Santos afirma que el sector agrícola nunca ha recibido tanto apoyo del Gobierno como ahora
No obstante a pesar del llamado al paro, varias agremiaciones campesinas como la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos, Anuc, confirmaron que no participarán en la protesta porque consideran que podría correr el riesgo de politizarse, ya que esta fue convocada a solo cuatro semanas de la primera vuelta presidencial. “Es demasiado riesgoso poner en tela de juicio la legitimidad del mismo movimiento campesino”, dijo Luis Alejandro Jiménez, presidente de la Anuc, luego de reunión con el gobierno.
Precisamente, una de las teorías que tiene el gobierno sobre esta nueva huelga es que habría intereses políticos de por medio. Así lo ha expresado Santos y su ministro de Agricultura en diferentes entrevistas con medios locales. Se suma que el gobierno y la policía también han hecho serios señalamientos sobre la posibilidad que algunos campesinos protestarían presionados por la guerrilla de las FARC, algo que han negado rotundamente los líderes de las protestas. “La guerrilla quiere infiltrar la movilización campesina”, insistió a los medios este lunes el ministro del interior Aurelio Iragorri.
Desde la semana pasada, el gobierno, encabezado por el ministro de Agricultura, ha sostenido varias reuniones con los líderes de la protesta sin llegar a ningún acuerdo. Este funcionario trató de disuadirlos insistiendo en que las puertas del diálogo están abiertas. Por eso hoy, a la par de las movilizaciones que transcurren en calma, se adelanta un encuentro entre las dos partes. “Peleamos por permanecer en el campo, por el derecho al trabajo, para no tener que irnos a las ciudades a mendigar”, fue el mensaje de uno de los líderes de la protesta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.