Santos designa a su exministro estrella como candidato a vicepresidente

En medio del escándalo por las interceptaciones ilegales a su correo electrónico personal y a tres meses de la primera vuelta presidencial, Juan Manuel Santos anunció que su fórmula vicepresidencial será el ex ministro y ex senador Germán Vargas Lleras, quien se desempeña desde hace un año como director de la Fundación Buen Gobierno, plataforma política de la reelección del mandatario colombiano.

El nombre de Vargas Lleras, un curtido político de origen liberal de 51 años y que es uno de los líderes natos del partido Cambio Radical, se impuso sobre el general en retiro y exdirector de la policía, Óscar Naranjo, quien había dicho a este periódico en una entrevista, que aceptaría ser el candidato a la vicepresidencia si Santos se lo pidiera. Esas declaraciones generaron todo un debate sobre quién sería más favorable para el presidente en su intención por lograr un segundo mandato.

Al hacer oficial su decisión, Santos le pidió a Vargas Lleras que, de ser elegidos, quería una vicepresidencia “diferente, activa” y agregó que su elección no obedece a cálculos políticos sino a “una íntima convicción”, ya que aseguró que lo une una sincera amistad con el político, nacido en Bogotá, la cual se basa en “la lealtad y la honestidad”.

Santos recordó que Vargas Lleras fue uno de sus ministros estrella cuando estuvo al frente de la cartera de Vivienda, en la que lideró uno de los proyectos bandera de Santos que era construir cien mil casas para entregarlas de manera gratuita a víctimas de la violencia, a campesinos afectados por la ola invernal que sacudió a Colombia en 2011 y familias pobres.

Los aliados políticos de Santos y Vargas Lleras celebraron la decisión, que era algo que se venía venir. El director del partido de la U, Sergio Diazgranados, colectividad que le dio el aval a Santos como su candidato presidencial, escribió su cuenta de Twitter que “será buena compañía en la campaña presidencial”. Por su parte, el presidente del Congreso, el liberal Juan Fernando Cristo, dijo que esta decisión suma votos y “demuestra coherencia, consistencia, trabajo en equipo, que es lo que ha demostrado cuatro años de la Unidad Nacional (coalición del gobierno)”.

El actual director de Cambio Radical, Carlos Fernando Galán y candidato al Senado, ya se había anticipado con bastante entusiasmo a este anuncio, cuando aseguró a medios locales que la fórmula Santos-Vargas no solo garantizaría la victoria en primera vuelta, sino que “el país tendría dos presidentes en una misma fórmula”.

Sin embargo, la designación de este político como candidato a la vicepresidencia no generó una acogida unánime. El senador por la U, Armando Benedetti, recordó que Vargas Lleras ha estado aislado del proceso de negociación que adelanta Santos con las Farc en La Habana. “Juan Manuel Santos le gusta la paz y a Vargas la guerra”, escribió en Twitter. No obstante, el elegido salió al paso de las críticas y reconoció que si bien ha sido escéptico, si se logra un acuerdo de paz sería “un soldado más” en su implementación.

A pesar de estas reacciones, lo que es claro es que con esta decisión de Santos le da un nuevo impulso a su candidatura ya que, según las últimas encuestas, aunque va puntuando no lograría hacerse a un segundo período en la primera vuelta y Vargas Lleras podría darle un empujón porque goza de una alta favorabilidad entre los colombianos. Además, hay un antecedente que puede ser significativo y es el hecho de que en su intento de llegar a la presidencia hace cuatro años obtuvo casi un millón y medio de votos. Habría que ver si esta tendencia se mantiene en esta nueva elección.

Lo que sí es cierto es que, con la elección del ex ministro, que se destaca por ser un buen ejecutor, Santos se asegura la adhesión de Cambio Radical, uno de los partidos de llamada Unidad Nacional, que además integran los liberales, el partido de la U.

Vargas Lleras es abogado, nieto del fallecido ex presidente liberal Carlos Lleras e inició su carrera a los 19 años bajo la tutela del llamado Nuevo Liberalismo, una disidencia del liberalismo oficialista que fundó el inmolado líder Luis Carlos Galán. A partir de ese momento comenzó una vertiginosa carrera política. Fue concejal de Bogotá y luego saltó al Senado en 1998 llegando a ser su presidente. Primero lo hizo con el liberalismo y después bajo la sombrilla del movimiento Colombia Siempre, una disidencia del oficialismo liberal que apoyó y ayudó a elegir en la presidencia a Álvaro Uribe en 2002.

El político después se pasaría al partido Cambio Radical, con el que se distanciaría de Uribe y en 2010 lanzó su candidatura a la presidencia logrando una gran aceptación. Luego Santos lo elegiría como ministro de Gobierno y después de Vivienda. De ese ministerio, el ahora candidato a la vicepresidencia y quien también sonaba como presidenciable, renunció y asumió la dirección de la Fundación Buen Gobierno, un centro de pensamiento que fundó Santos en la década de los noventa y que reactivó precisamente para promover su programa reeleccionista. Desde entonces se ha mantenido a su lado.