Las autodefensas pelean el control de otro municipio en Michoacán

Los grupos de autodefensa han entrado este domingo en Múgica, el nombre oficial de una ciudad conocida como Nueva Italia, de más de 30.000 habitantes y la segunda en importancia de Tierra Caliente, la región que concentra el conflicto entre narcotraficantes y civiles armados en Michoacán, al suroeste del país.

Los hombres armados citaron a los habitantes en el centro de la ciudad y repitieron lo mismo que han dicho en los municipios (al menos 10) y las decenas de pueblos que controlan: que están ahí para expulsar a Los Caballeros Templarios, el cártel del narcotráfico que opera en la zona, que invitan a quien lo desee a tomar un arma y unirse a ellos y que se harán cargo, a partir de ese momento, de la seguridad local. Las autodefensas culpan a las policías locales de apoyar al narcotráfico y encarcelan a los agentes.

La inestabilidad, no obstante, es evidente. El líder de los grupos de autodefensa de La Ruana, Hipólito Mora, afirmó al periódico La Jornada Michoacán que desconoce a los civiles armados que entraron a Nueva Italia, aunque no descartó que el grupo fuera “legítimo”. Mora es, junto con José Manuel Mireles, jefe de las autodefensas de Tepalcatepec, uno de los líderes más conocidos de estos grupos armados surgidos en febrero del año pasado.

Mireles sufrió un accidente de avioneta el pasado 5 de enero y fue trasladado a un hospital de la Ciudad de México, donde la policía lo custodió. Se creó una gran polémica porque había sectores que exigían que sobre él cayese todo el peso de la ley. Este domingo fue trasladado por la policía federal a un lugar desconocido, según informa el periódico Reforma.

Lo que ha ocurrido en Nueva Italia pasa con cada vez más frecuencia en Michoacán, pero la diferencia es que la ciudad, cabecera del municipio de Múgica, es la segunda más grande de la región después de Apatzingán, el centro político y económico de la región y que tiene 80.000 habitantes.

Nueva Italia está además a una hora de trayecto en coche de Uruapan, la segunda ciudad más importante de Michoacán, donde hubo también enfrentamientos este domingo.

La policía federal cerró tramos de la autopista siglo XXI, que atraviesa el estado y une a la capital mexicana con el puerto de Lázaro Cárdenas, en la costa del Pacífico y el más importante de carga del país.

El vía crucis de Apatzingán no es nuevo. La ciudad es una de las más golpeadas por la guerra entre carteles y fuerzas federales y ahora las autodefensas. La situación ha sido inestable desde hace por lo menos siete años. Pero este sábado la violencia alcanzó cotas inéditas. Grupos de encapuchados prendieron fuego a la alcaldía y a la biblioteca municipal, a tres tiendas de alimentos Oxxo (muy conocidas en México) y a negocios locales.

El panorama para los habitantes de la ciudad es desolador. La actividad comercial está prácticamente paralizada. No abren los negocios, ni los restaurantes. Las clases permanecen suspendidas y no hay autobuses comerciales que viajen a la zona. Los incendios dañaron las instalaciones de fibra óptica, lo que ha causado fallos en el servicio de Internet y telefonía desde hace tres días. Las calles, cuenta un habitante de la ciudad, están vacías.

El gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo, convocó a la prensa este domingo y pronunció un mensaje en que dijo que las fuerzas oficiales no tolerarían más hechos violentos. “Vamos por ellos”, afirmó. Anunció también que mantendrá una reunión con representantes del Gobierno de Enrique Peña Nieto mañana, lunes, en la capital michoacana, Morelia. El secretario de Gobernación mexicano [ministro de Interior] Miguel Ángel Osorio Chong viajará a la ciudad para analizar la situación.

Michoacán es el mayor productor de marihuana y metanfetamina del país y un punto estratégico en el trasiego de droga. Fue el Estado que el expresidente mexicano –michoacano, además- Felipe Calderón eligió para iniciar la guerra contra el narcotráfico en diciembre de 2006. La violencia se ha cobrado ya más de 80.000 muertos y ha causado otros 30.000 desaparecidos en todo el país.