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“El Gobierno y la oposición venezolana tienen que relajarse”

El periodista Ignacio Ramonet publica ‘Mi primera vida’ sobre Hugo Chávez, desde su infancia hasta que llegó al poder

Mari Luz Peinado
El periodista y escritor Ignacio Ramonet.
El periodista y escritor Ignacio Ramonet. SAÚL RUIZ

Varias veces al año entre 2008 y 2011, Hugo Chávez y el periodista Ignacio Ramonet se encerraban durante un par de días en alguna casa y se dedicaban a hablar durante horas. En un ejercicio que podía prolongarse durante más de 12 horas cada jornada - es conocida la capacidad oratoria del antiguo presidente venezolano - y que podría parecer una mezcla entre una terapia de psicoanálisis y una entrevista en profundidad, los dos personajes se entregaban a la misión de reconstruir la vida del líder venezolano desde su infancia en el pueblo de Sabaneta (en el Estado de Barinas) hasta el 2 de febrero de 1999, el día que Chávez arrancó su primer mandato presidencial. 

El director de Le Monde diplomatique en español procesó toda esa información sobre la etapa pre-presidencial de Chávez, redujo las horas de conversación a 700 páginas y las convirtió en una “autobiografía dialogada” bajo el título Mi primera vida (Debate). Ramonet presenta su último libro en la FIL de Guadalajara dos días antes de unas elecciones municipales en Venezuela. Y, aunque ha venido a México a promocionar este tomo que habla del pasado, la conversación pasa rápidamente al presente - la política de Maduro - y hacia el futuro - la cita electoral. Hace dos semanas que viajó al país y acompañó al presidente Nicolás Maduro en un acto. El escritor y periodista reconoce que la crispación ha aumentado en los últimos meses y que los resultados de las municipales del domingo son un test en tiempo real a la gestión del presidente. 

Pregunta. ¿Por qué escribir una biografía parcial de Hugo Chávez y no una de toda su vida?

Respuesta. Cuando yo le propuse escribir un libro, en 2008, él estaba en plena posesión de sus capacidades físicas e intelectuales. No tenía sentido hacer un libro de una parte de su vida política. Pero la etapa anterior a ser presidente ya estaba cerrada. Su figura siempre fue muy polémica y era una manera de responder a una imagen que se tenía de él y que muchas veces lo tildaba de un hombre inculto, burdo, etc. 

P. ¿Hubo algún momento en el que sintiera que le estaba contando un secreto?

R. Muchísimos. Hay gente muy cercana a él, miembros de su familia, que han leído el libro y me han dicho que más de la mitad de lo que dice lo ignoraban. Me cuenta, por ejemplo, cómo perdió la virginidad con una prostituta en 1969. Él mismo, que era un hombre muy racional, muy cartesiano y organizado, según avanzan las conversaciones va hablando de cosas de las que hacía años que no hablaba. Por eso digo que es una “autobiografía dialogada”. Yo le ayudo a decir lo que quiere decir. 

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P. Usted tenía confianza con él. ¿Plantea el diálogo como amigo o como periodista?

R. Como periodista, claro. En el libro se ve que le hago preguntas incómodas. Hablamos de que en Venezuela sigue habiendo corrupción e inseguridad. 

P. La confianza, ¿no hace más difícil un libro así?

R. Lo conocía bien y sí, había confianza, pero nunca lo he tratado como un amigo. Por otra parte, si no hubiese existido esa cercanía no hubiésemos podido hacer el libro y nos hubiéramos perdido toda esta información. Algunos medios fueron muy crueles siempre con Chávez por lo que él era muy prudente con los periodistas. Esa relación de confianza no impide que yo siga mi propósito de tratar de explicar cómo Chávez se convirtió en un líder. 

P. De todos esos momentos, ¿cuál es clave para entenderlo?

R. Indiscutiblemente, si no hubiese habido Caracazo, no habría habido Chávez. Por otra parte, si la Cuarta República hubiese sido menos represiva, tampoco hubiera existido esta figura porque él se constituye el 4 de febrero de 1992 [el Golpe de Estado], hasta entonces era un desconocido. 

P. Últimamente se han publicado varios libros sobre la figura de Chávez, ¿cree que se le está haciendo justicia?

R. Creo que ha habido un cambio en los medios de comunicación, incluso los más hostiles. A lo mejor es por el respeto de que ya ha muerto o porque se dieron cuenta de que era un hombre querido porque la gente salió a la calle en sus funerales. Además, creo que ahora se puede medir mejor su influencia, porque ya acabó su etapa.  

P. Usted conoce bien Venezuela y a su Gobierno. ¿Tendrá continuidad el chavismo?

R. Aún no podemos saberlo, no ha pasado ni un año. Chavez es indiscutiblemente insustituible y murió antes de que la nueva generación política se hubiera terminado de formar. Pero creo que el chavismo es como el peronismo y que incluso la oposición no puede hacer política fuera del chavismo. Seguí la campaña de Capriles y fue excelente pero no atacaba la raíz del chavismo, a la escuela y la sanidad pública, a las misiones… En Argentina no se puede hacer política sin pasar por el peronismo y Chávez cambió más Venezuela durante su mandato que Perón Argentina. Creo que hay chavismo para 50 años. Es la victoria intelectual de Chávez. 

P. ¿Piensa que el rumbo que ha tomado Maduro es el que quería Chávez?

R. Creo que sí. Pero el domingo tenemos un test en tiempo real en las elecciones municipales. Maduro se juega mucho porque en las presidenciales aún estábamos en el duelo de Chávez. Son una prueba capital pero tampoco hay que olvidar que no son decisivas, el presidente va a seguir siendo presidente. Aunque si la oposición gana, va a buscar el referéndum revocatorio. Maduro sigue los objetivos de Chávez, que sacó de la pobreza a millones de personas, les hizo sentirse orgullosos de ser venezolanos y también les dio poder, a través de las comunas, por ejemplo. 

P. ¿Y la Ley Habilitante no es un poco lo contrario a repartir el poder?

R. La Habilitante es una práctica más habitual en Venezuela de lo que se cree. Es constitucional y solo es durante un año. La usaron los presidentes anteriores a Chávez y en otros países, como Francia, también existe la posibilidad de gobernar por decreto. 

P. ¿Es sostenible el punto de confrontación que se vive en los últimos meses en el país?

R. Creo que no es razonable para el país que haya esta confrontación. Hay una lucha muy intensa, como no se veía en Venezuela desde 2002. Después del domingo habrá dos años sin elecciones: el Gobierno podrá gobernar sin la presión electoral. Tanto ellos como la oposición tienen que relajarse. 

P. ¿Podría escribir un libro como Mi primera vida sobre Maduro?

R. No es lo mismo. Ahora no podría hacer un libro así con ningún líder. Es mucho trabajo y no se puede hacer si no existe un deseo amplio por las dos partes. Conozco a Maduro pero aún está llegando y hay que darle la oportunidad de que se transforme en un líder reconocido. En mi opinión, tiene todas las cualidades. 

P. ¿Es necesario un día de la lealtad a Chávez?

R. Es algo simbólico, pero estoy convencido de que una mayoría de los venezolanos tienen afecto a Chávez. Los que quieran lo van a celebrar y los que no, no. Porque también hay gente que detesta a Chávez, claro, y él es primero que lo sabía.

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Sobre la firma

Mari Luz Peinado
Redactora jefa de Estrategia Digital. Ha sido directora de Verne, por lo que recibió el Premio de Periodismo Digital José Manuel Porquet junto a Lucía González. Antes, fue redactora de El País en México y trabajó en Smoda, MSN y Soitu.es. Escribe el boletín semanal 'Correo sí deseado', que selecciona historias positivas y que aportan soluciones.

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