Los accidentes de tránsito son la segunda causa de muerte violenta en Colombia

Una persona al volante en Colombia tiene 4 veces más probabilidades de morir en un accidente de tránsito que un conductor en España o Gran Bretaña, lo cual convierte a dichos accidentes en la segunda causa de muerte violenta en el país andino después de los homicidios.

La situación es reflejo de un fenómeno que se extiende por toda Latinoamérica, que muestra uno de los índices de siniestralidad vial más elevados del mundo: 19,2 muertes por cada 100,000 habitantes, más de tres veces la tasa de algunos países europeos, de acuerdo a expertos del Banco Mundial.

He aquí un ejemplo cotidiano que ilustra la gravedad de la situación.

Oscar Peláez es uno de los muchos colombianos que visto la muerte de cerca en las carreteras de su país.

Un día de lluvia estaba conduciendo en la carretera hacia Ayapel en el departamento de Córdoba, 800 kilómetros al norte de Bogotá. No tenía mucha visibilidad y no había señalización, cuando de repente vio un carro salir de la curva enfrente de él. El automóvil estaba tratando de adelantar otro carro, explica el joven de 30 años.

Oscar trató de esquivarlo, se salió de la carretera y chocó contra los árboles. Se despertó en el hospital.

Problema de salud pública

Accidentes así en las calles y carreteras de Colombia no son inusuales. Un nuevo reporte del Banco Mundial “Análisis de la Capacidad de Gestión de la Seguridad Vial en Colombia” afirma que las lesiones y muertes por accidentes en las rutas “son un importante problema social y de salud pública”.

Las cifras oficiales de muertes y lesionados en accidentes viales varían según los estudios, pero según el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, las muertes superan las 5.500 por año. En 2011, hubo casi 41.000 lesionados. La mayoría de las muertes (el 70%) ocurren en las ciudades.

“Hoy por hoy se habla de 12,8 muertos por cada cien mil habitantes en Colombia, el promedio en Europa es de 10,3; y los países que han logrado mejores resultados han llegado a menos de cinco muertos por cada cien mil habitantes,” dice Verónica Raffo, especialista en Infraestructura del Banco Mundial.

El problema no es ajeno al resto de la región. Raffo explica en un reciente blog que los siniestros viales son la primera causa de muerte entre personas de 15 a 44 años. En Colombia, Costa Rica y República Dominicana, por ejemplo, el 75% de las víctimas son los llamados usuarios vulnerables -el ciudadano de a pie, en bicicleta y en motocicleta.

El número total de muertes en la región es escalofriante: 130.000 muertes por año, 6 millones de heridos y cientos de miles de discapacitados. El número de heridos es equivalente a dos países del tamaño de Uruguay, tres ciudades como La Paz.

El informe sobre Colombia destaca que el gobierno está tomando el problema en serio, pues lo incluyó en el Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014, y varias instituciones estén involucradas en el tema. “Es claro el compromiso de las instituciones nacionales en Colombia para abordar el tema”, afirma Raffo.

Pero todavía queda mucho por hacer. “Los datos de siniestralidad y mortalidad en temas viales se han mantenido estables en los últimos 10 años, es decir, si bien se han tomado acciones, estas no han sido suficientes para quebrar la tendencia y lograr la reducción como en otros países del mundo”, señala.

Falta de control

El estudio destaca algunas otras debilidades del sistema de seguridad vial en Colombia:

-Falta de normas de seguridad para la infraestructura o la señalización

- Falta de control en cuanto al otorgamiento de licencias y la matriculación de los carros

- Fallas en la metodología de educación en seguridad vial o

- Falta de coordinación en el manejo de la información sobre seguridad vial.

La principal recomendación del estudio del Banco Mundial es la creación de una Agencia Nacional de Seguridad Vial que sea independiente y que responda a una clara política de Estado. La nueva entidad, propone el estudio, debería tener suficiente autonomía para tomar acciones directas en los aspectos clave mencionados arriba.