Disminuyen los flujos de buques y carga por el canal de Panamá

Panamá y Nicaragua prosiguen su competencia centenaria: con el proyecto de China de invertir 40.000 millones de dólares en los próximos años para construir una vía que una a los litorales nicaragüenses del Pacífico y del Atlántico y con la inversión multinacional de 5.250 millones para ampliar y modernizar la ruta panameña abierta en 1914, un foco rojo de alarma se encendió en el negocio canalero.

El tránsito de buques de alto calado por el Canal de Panamá registró una disminución en enero y febrero de 2013 en comparación con el mismo periodo de 2012 y podría cerrar este año con una rebaja de ingresos por tarifas ante la merma del flujo de embarcaciones, por factores combinados como la crisis económica y las dificultades financieras en tres de los principales clientes de la vía interoceánica: Europa, Estados Unidos y China.

Un informe del estatal Instituto Nacional de Estadísticas y Censo de la Contraloría General de Panamá reveló que en los dos primeros meses de este año los indicadores del Canal—que es uno de los más importantes activos de la economía panameña—“reportaron variaciones negativas” de un 2.5% en el ingreso por peajes, de un 9% en las toneladas netas desplazadas, de un 7.2% en el volumen de carga transportada y de un 9% en el tránsito de naves.

El tránsito de buques por el Canal de Panamá registró una disminución en enero y febrero de 2013 en comparación con el mismo periodo de 2012

El informe, suministrado por el Instituto a EL PAÍS también mostró que el “movimiento de carga” en el sistema portuario panameño “se redujo” el 11.4%, en especial la carga en contenedores (16%) y a granel (4.4%), aunque registró un “cambio positivo” de 2% en la carga general: “Se observaron variaciones negativas en los indicadores registrados por la Autoridad del Canal de Panamá como el tránsito de naves (buques de alto calado), ingresos por peaje, las toneladas netas desplazadas y volumen de carga transportada, así como en el movimiento de carga en toneladas métricas y contenedores del Sistema Portuario Nacional”.

Estados Unidos, con un flujo de 143,5 millones de toneladas de carga en puertos estadounidenses, y China, con 52 millones transitando por puertos chinos, se reafirmaron en 2012 como los principales clientes mundiales. Pero los movimientos de ambos bajaron en 2012 con respecto a 2011, cuando Estados Unidos movilizó 146,2 millones de toneladas y China un total de 53,1 millones, según cifras de la estatal Autoridad del Canal de Panamá (ACP).

Los ingresos del Canal por peajes también se redujeron en enero y febrero de 2013 a 301.7 millones de dólares por primera vez desde que se inició un crecimiento sostenido en el mismo periodo 2009, con 229.7 millones, según el Instituto. En el mismo periodo de 2012 sumaron 309,6 millones, tras alcanzar 229,7 en enero-febrero de 2010 y 302,9 millones en ambos meses de 2011.

La reducción es un reflejo del flujo de embarcaciones. De acuerdo con el informe, un total de 2.180 naves de alto calado transitaron por la ruta interoceánica en enero y febrero de 2009 y se llegó a 2 mil 266 en los primeros dos meses del año anterior, pero en el mismo periodo de 2013 se bajó a 2 mil 17.

En este contexto, las cifras de transporte de carga son significativas, en momentos en que una empresa de China obtuvo a mediados de junio anterior una concesión del gobierno nicaragüense para construir un canal en ese país y coronar un viejo sueño político, socioeconómico y financiero de Nicaragua que se quedó relegado en la historia desde que la ruta panameña entró en operaciones, hace casi un siglo.

En una entrevista con El PAÍS, el panameño Alberto Alemán Zubieta, quien de 1996 a 2012 fue la máxima autoridad del Canal de Panamá, afirmó el 10 de junio: “El proyecto nicaragüense en lo personal no lo veo viable, primero porque los números son altísimos y porque es más de dos veces más largo” que la vía panameña. La obra planeada por Nicaragua—de unos 190 kilómetros de longitud frente a los 80 de la vía panameña—tendría una elevación más alta “y no creo que vaya a brindar ningún beneficio alternativo a lo que el Canal de Panamá ofrece”, aseveró Alemán.

Ficha clave

Pese a la crisis económica en Europa y Estados Unidos y a su impacto en China, el Canal había consolidado en 2012 su recuperación como nervio del negocio marítimo mundial y alcanzó una cifra sin precedentes en el transporte de mercancías hacia y desde los océanos Atlántico y Pacífico, con un total de 333,7 millones de toneladas.

Sin embargo, el comportamiento de enero y febrero anterior reportó una disminución con respecto a 2012. De 37,7 millones de toneladas que transitaron por el Canal en enero y febrero del año pasado, se bajó a 34,5 millones en los dos primeros meses de 2013, de acuerdo con el Instituto. La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) calculó que aunque 2013 cerrará con disminución, superará las 322 millones de toneladas de 2011.

La variación porcentual mensual negativa de enero de 2013 frente a enero de 2012 fue de un 7.3% y de un 7% en febrero de 2012 en comparación con febrero de 2013.

El Canal, en funciones desde 1914 y que en 2008 detuvo su ritmo ascendente en el transporte de carga al resentir el impacto de la recesión mundial, logró en 2012 su segundo crecimiento consecutivo superior al alcanzado en 2007, cuando registró un total de 312.9 millones de toneladas. Las cifras bajaron a 309.6 millones en 2008 y a 299.1 millones en 2009, para empezar a recuperarse en 2010 con 300.8 millones y superar en 2011, con 322.1 millones, su máximo registro previo de 2007.

El control pleno de la ruta canalera fue asumido por Panamá al mediodía del 31 de diciembre de 1999 al recibirlo de Estados Unidos, tras permanecer bajo mando de Washington desde que comenzó su construcción en 1904 y al iniciar operaciones en 1914.

Los registros canaleros se producen en momentos en que prosiguen los trabajos de ampliación de la ruta, por la que pasa 5% del transporte marítimo mundial y es estratégica en el comercio global. Con la ampliación, que empezó en septiembre de 2007 y estará lista en abril de 2015, se permitirá el paso de buques de mayor tamaño y habrá un nuevo juego de esclusas en ambos litorales.