EE UU y Cuba retoman las negociaciones para restaurar el servicio postal
El Departamento de Estado advierte de que no se trata de un cambio en la política hacia la isla Los grupos de exiliados lo consideran un primer paso pero insuficiente
Estados Unidos y Cuba retomarán esta semana las negociaciones para tratar de restaurar el servicio postal directo entre ambos países, suspendido desde 1963. El Departamento de Estado, que ha confirmado el reinicio de las discusiones, ha insistido en que la iniciativa no supone un viraje en la política de este país hacia la isla, mientras los grupos de exiliados han dado la bienvenida a este acercamiento, si bien, lo consideran insuficiente.
“Cualquier paso para agilizar el intercambio de personas y recursos entre ambos países es positivo”, señala en conversación telefónica Tomás Bilbao, director ejecutivo de Cuban Study Group, una organización independiente formada por profesionales y empresarios cubanoamericanos y estadounidenses. “Pero si la Administración Obama quiere mantener su compromiso de facilitar los procesos de cambio en Cuba, aún le quedan cosas mucho más importantes por hacer”, advierte Bilbao.
Las negociaciones para restablecer el servicio postal directo se desarrollarán entre el martes y el miércoles y estarán lideradas por Lea Emerson, directora de Relaciones Internacionales del Servicio de Correos de EE UU, y José Cabanas Rodríguez, responsable de la Oficina de Intereses Cubanos en Washington. Desde el Departamento de Estado han advertido de que el contenido de las reuniones será “eminentemente técnico” y se ha instado a que no se analice en clave política un posible acuerdo.
Desde que se suspendió el envío directo de cartas y paquetes entre los dos Estados en 1963, sus ciudadanos logran remitir sus remesas a través de terceros países
No es la primera vez que EE UU y Cuba abordan la posibilidad de reanudar el servicio postal entre ambos países. En 2009 ya se iniciaron unas negociaciones que no fructificaron. Desde que se suspendió el envío directo de cartas y paquetes entre los dos Estados en 1963, sus ciudadanos logran remitir sus remesas a través de terceros países, eminentemente México. “Se trata de un asunto que viene de lejos y es uno de los grandes temas pendientes”, señala en conversación telefónica Antonio Zamora, abogado y presidente de la Fundación para la Normalización de las Relaciones entre EE UU y Cuba. “Habrá que afinar en temas relacionados con la seguridad, pero es un paso que puede abrir las puertas a otras negociaciones que, quizás, de momento no estén contempladas todavía”, indica.
El presidente Barack Obama inició su presidencia con la intención de realizar una aproximación al régimen castrista para favorecer la transición democrática y reforzar a la sociedad civil cubana, pero la detención por las autoridades cubanas del contratista estadounidense Alan Gross,en 2009, y su posterior condena a 15 años, acusado de atentar contra la independencia y la integridad del Estado, provocaron que se congelara ese acercamiento.
La noticia de la reanudación de las conversaciones entre ambos países llega en medio de un profundo malestar entre el exilio cubano en EE UU, muy molesto por la decisión del Departamento de Estado de mantener a Cuba en la lista de países terroristas. Muchos consideran esta decisión una concesión al sector más duro y reaccionario del Congreso estadounidense. La semana pasada, más de medio centenar de profesionales, académicos e intelectuales cubanoamericanos remitieron una carta al presidente solicitándole la exclusión de la isla de la relación de Estados promotores del terrorismo y desvinculándose de las políticas de varios congresistas de origen cubano, favorables a esta inclusión.
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