Berlusconi denuncia a 'L'Unità' y le exige tres millones de euros
Cita a juicio a la directora y a cuatro periodistas más, todas ellas mujeres.- Pide que se impida el acceso en la web de las noticias que le afectan.- Concita De Gregorio: "Es una intimidación más para tapar la boca a los medios que no controla"
Tras presentar denuncias contra las diez preguntas de La Repubblica, y anunciar otras contra el Nouvel Observateur, El PAÍS y varios periódicos británicos sin especificar, Silvio Berlusconi ha decidido demandar también a L'Unità, el periódico que fue el órgano de información del PCI y que hoy es independiente y muy crítico con su gestión política.
La directora, Concita de Gregorio , ha recibido este miércoles dos citaciones a juicio y sendas reclamaciones de indemnización por un valor total de tres millones de euros firmadas por el primer ministro italiano. Éste reclama además una pena económica de 200.000 euros por cabeza a cinco firmas femeninas del periódico: la propia De Gregorio, las periodistas Natalia Lombardo y Federica Fantozzi, la articulista Maria Novella Oppo y la escritora Silvia Ballesta.
La reclamación de daños, explica la nota emitida por el diario romano, "se refiere a todas las informaciones dedicadas al escándalo sexual que protagoniza el primer ministro publicadas en el periódico el 13 de julio y el 6 de agosto". Las actas, contenidas en 32 páginas, piden además al juez que impida el acceso a las noticias objeto de la demanda en la página web de L'Unità.
Concita De Gregorio, que dirige el diario desde hace un año tras ser durante dos décadas enviada especial de La Repubblica, explica que la denuncia "no es una querella, sino una acción civil dirigida contra números enteros del periódico, lo que supone una intimidación de enorme gravedad y un intento de censura preventiva. Pedirnos tres millones de euros, que es una parte importante de nuestro capital, es solo una forma de taparnos la boca", añade. "A Berlusconi no le interesa poner querellas sobre el contenido de tal o cual artículo, porque no le interesa que la verdad se conozca. De forma que nos amenaza pidiendo dinero".
Entrando en el detalle, la denuncia considera difamatorios dos editoriales firmados por la directora ["L'etica elastica" -La ética elástica- e "Iniezioni di fiducia" -Inyección de confianza-], además de un sinfín de reportajes, crónicas y comentarios incluidos en varios números del periódico.
La denuncia juzga además difamatorias "las críticas dirigidas al primer ministro a propósito de su ausencia en eventos internacionales y su participación, en ese mismo momento, en encuentros con la escort Patrizia D'Addario", explica la nota emitida por el diario.
Las relaciones con el Vaticano
Berlusconi considera también difamatoria "la reconstrucción de las relaciones entre el entorno cercano al primer ministro y la jerarquía vaticana a fin de que ésta asumiera una actitud indulgente hacia su comportamiento".
Según De Gregorio, la "ofensiva de otoño de Berlusconi consiste en tratar de amordazar a los medios libres que no puede controlar. No quiere dinero, ni ir al tribunal, ni que se establezca la verdad de los hechos. Solo amedrentar a sus rivales políticos. Y justamente por eso ha contratado a Vittorio Feltri para Il Giornale".
El escrito contesta la cita de un chiste de Luciana Littizzetto sobre el supuesto uso, por parte de Berlusconi, de tratamientos contra la impotencia sexual, afirmaciones falsas, dice el abogado, "que lesionan el honor del primer ministro y su identidad personal al presentar al Honorable Berlusconi como un sujeto que en realidad no es, es decir, como una persona con problemas de erección".
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