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Enrique Bolaños será juzgado por presunto tráfico de indocumentados

El ex presidente de Nicaragua encubrió a su director de Migración

El ex presidente de Nicaragua Enrique Bolaños (2002-2007) será procesado junto al ex director general de Migración Fausto Carcabelos por un presunto delito de tráfico de indocumentados, aseguró ayer la prensa nicaragüense según fuentes judiciales. En octubre de 2006, la policía determinó que al menos 159 personas procedentes de países a los que el Gobierno había colocado en una categoría de acceso restringido ingresaron en Nicaragua sin el visado requerido para esos casos.

Según los documentos judiciales, Bolaños habría actuado como encubridor de quien fue su Director General de Migración y Extranjería, Fausto Cascabelos, a quien se le investiga desde octubre del año pasado por varias irregularidades, entre ellas, la autorización del ingreso al país de personas que requerían visado.

Las investigaciones de la policía nicaragüense apuntan a que Cascabelos estaría también involucrado en el caso de seis ciudadanos chinos que ingresaron en territorio nicaragüense de forma ilegal, pero no hay pruebas que lo evidencien. Este caso está siendo investigado en Honduras, donde los ciudadanos chinos fueron capturados.

El diario La Prensa asegura que Bolaños está implicado en el asunto y que sería acusado de encubridor, ya que impidió que el ex ministro de Gobernación, Francisco Fiallos, destituyera a Cascabelos de sus funciones al conocerse las investigación en 2006.

Además, la fiscalía nicaragüense indicó que Bolaños podría ser acusado de "cooperador necesario" ya que supuestamente, al dejar que Cascabelos continuase en su puesto, buscaba borrar las pruebas que implicaban a los funcionarios en el presunto tráfico de indocumentados.

El ex presidente de Nicaragua se hizo popular dentro y fuera del país cuando, tras llegar al poder en 2002, ordenó el procesamiento del ex presidente Arnoldo Alemán Lacayo, acusado de graves delitos de corrupción y lavado de dinero. Bolaños había sido vicepresidente de Alemán Lacayo durante el mandato 1997-2002.

Para poder procesar a Bolaños, el Parlamento lo tendrá que desaforar primero, ya que en su calidad de ex presidente de Nicaragua, tiene un puesto automático en la Asamblea Legislativa Nacional.

Los partidos mayoritarios, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y el Partido Liberal Constitucionalista (PLC), enemigos del ex mandatario, darían sus votos para un posible desafuero.

De ser procesado y condenado por la justicia, sería el segundo mandatario nicaragüense sentenciado por delitos de corrupción.

En la actualidad, Alemán Lacayo cumple una condena de 20 años de cárcel por corrupción, pero goza de beneficios penitenciarios que le otorgó la justicia local: puede movilizarse por todo el país, mientras lucha para que el actual Gobierno del sandinista Daniel Ortega le otorgue una amnistía.

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