Lula asegura que Mercosur y Suramérica son las regiones económicas "más pujantes"

El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, ha presentado hoy en el Foro Económico Mundial a Mercosur como una entidad fortalecida, a Suramérica como una subregión cada vez más integrada y a su propio país como un líder que promueve una nueva geografía comercial a escala mundial. En un discurso marcado por un recuento de los logros en sus dos años de Gobierno, el mandatario ha asegurado que Brasil no busca pelearse ni con la Unión Europea (UE) ni con Estados Unidos, sus dos mayores socios comerciales, sino crear nuevos tipos de alianzas con ellos.

En ese sentido, ha señalado que el Mercosur (formado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) es fuerte y está listo para suscribir un acuerdo comercial con la UE, "lo cual es difícil pero necesario para lograr condiciones comerciales más democráticas". Lula se ha mostrado orgulloso del papel del liderazgo que Brasil ejerce en el Grupo de los 20 (G-20), conformado por países en desarrollo, muchos de ellos latinoamericanos, y cuyo propósito es ejercer una mayor influencia en las negociaciones que tienen lugar en el marco de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Llegado directamente del Foro Social de Porto Alegre, lanzado como una plataforma de debate ideológicamente opuesta al Foro de Davos, el presidente brasileño se ha dirigido aquí a un auditorio dominado por influyentes empresarios. A ellos les ha garantizado que el ciclo de crecimiento económico brasileño se ha consolidado y que "no habrá retrocesos". "Estamos ante un momento político histórico", ha subrayado Lula, tras reiterar que al final de su mandato "todos los brasileños podrán comer tres veces al día" y que de esa manera él podrá "morir tranquilo".

Brasil, en el Consejo de Seguridad

El mandatario se ha referido también a las ambiciones de Brasil de convertirse en miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, junto con otros grandes países en desarrollo. "Es necesario democratizar las Naciones Unidas y que el Consejo de Seguridad integre a más países, porque eso evitaría que se repitan casos como el de la guerra en Irak a causa de la decisión unilateral de un país", ha señalado, para añadir que apoya también las candidaturas de Alemania, India y Japón. El presidente de Brasil ha confesado que su sueño es que en su próxima participación en el Foro de Davos, Brasil haya logrado su objetivo de integrar el órgano más influyente y decisivo de la ONU.

La lucha contra el hambre y la pobreza, uno de los temas en los que Lula se ha convertido en un líder de referencia mundial, también ha estado presente en su alocución. Lula ha indicado que las reformas económicas e institucionales que su Gobierno ha llevado adelante han permitido que se cuente con los recursos para tomar medidas concretas en favor de los sectores más pobres en Brasil. Al respecto, ha precisado que su programa Hambre Cero garantiza la alimentación de 6,5 millones de familias y que para fines de 2005 el objetivo es llegar a 8,7 millones de hogares.

Lula participará mañana en una reunión con inversores, a los cuales ofrecerá, según ha dicho, "estabilidad económica y fiscal", así como "la garantía de un crecimiento sostenido". En este encuentro también participarán los ministros brasileños de Exteriores, Celso Amorim, de Industria y Comercio, Luiz Fernando Furlan, y de Finanzas, Antonio Palocci Filho. La delegación brasileña espera reunir a gran parte de los ejecutivos, muchos de ellos representantes de poderosas multinacionales, en esa cita dedicada a las posibilidades de inversión en Brasil.