Israel estudia un nuevo trazado del muro que pasará a un kilómetro de las casas palestinas

La "valla de seguridad" que el Gobierno de Israel levanta a lo largo del territorio ocupado de Cisjordania pasará a un kilómetro de las casas palestinas más cercanas a ese muro, según los nuevos planes sobre su trazado que han elaborado los organismos militares a cargo de la obra a los que ha tenido acceso el diario israelí Yediot Aharonot. Esta modificación del trazado original de la frontera, que afectará a centenares de miles de palestinos, obecede al fallo del Tribunal Supremo de Justicia, que hace dos semanas ordenó en una sentencia sin precedentes cambiar el trayecto en 30 kilómetros de un tramo de 40 kilómetros.

Los jueces admitieron seis demandas de 35.000 palestinos perjudicados por el trazado previsto de la valla, que los dejaría separados de sus centros de servicios y de 5.000 hectáreas de sus tierras de cultivo, al norte del distrito de Jerusalén. En algunos casos en los tramos ya levantados -alrededor de un tercio de los 700 kilómetros que tendrá finalmente el llamado por los palestinos "muro de la vergüenza"- las casas palestinas quedan prácticamente pegadas a la valla, que cerca de centros urbanos es una barrera de bloques prefabricados de cemento.

Sólo el jefe de la zona militar central, general Moshé Kaplinsky, con jurisdicción en Cisjordania, podrá reducir la distancia de un kilómetro entra la valla y el vivienda palestina más cercana a ella. El periódico agrega que el muro no podrá "encerrar" en enclaves territoriales a los campesinos palestinos ni separarlos de sus campos.

Ordenan aliviar los bloqueos

El muro, levantado por el Gobierno "para defender a los israelíes del terrorismo palestino" y criticado por el Tribunal Supremo porque en muchos de sus tramos no tiene en cuenta los perjuicios que causa a la población palestina, fue declarado ilegal el pasado viernes por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya. Los magistrados de ese tribunal afirmaron en su dictamen, elaborado según una petición de la Asamblea General de la ONU, que Israel debe destruir esa valla por levantarla en territorios ocupados e indemnizar a los damnificados hasta la fecha. Sin embargo, el Gobierno israelí ha decidido obviar la opinión de esta corte al tiempo que ha anunciado que acatará el veredicto del Tribunal Supremo de Israel.

El Yediot Aharonot también informa de que los organismos del aparato de seguridad responsables de esa "valla de separación" de los palestinos tienen orden de aliviar los bloqueos que producen las barreras de control militar en las rutas de Cisjordania e impiden o restringen la libertad de movimientos a sus residentes. Las autoridades militares han ordenado "acercarse lo más posible" a la "línea verde", el límite pactado en las negociaciones del armisticio de Rodas, que puso fin a la primera guerra árabe-israelí de 1948-49.

Según fuentes castrenses, en un plazo de diez días a dos semanas, los encargados de la obra informarán de las modificaciones que introduzcan en el trayecto del muro al jefe de las Fuerzas Armadas, general Moshé Yaalón, y al ministro de Defensa, Shaul Mofaz.