La policía israelí prohíbe la entrada a la mezquita de Al Aqsa en Jerusalén
El ejército de Sharon mata a un agricultor palestino, un niño de 14 años y a un supuesto miembro de Hamás
Las fuerzas de seguridad israelíes han decidido imponer una serie de restricciones para todos aquellos que deseen rezar hoy viernes, el día de la semana más importante para los musulmanes, en la mezquita de Al Aqsa, situada en la ciudadela de Jerusalén. Las fuerzas de seguridad de Israel han recibido advertencias de que ciertos grupos tienen la intención de intentar perturbar la calma, por lo que la Policía ha desplegado refuerzos en Jerusalén este y alrededor de la mezquita, según fuentes policiales.
Durante los últimos tres años de enfrentamientos entre palestinos e israelíes, los musulmanes en Cisjordania han tenido serias dificultades para rezar en la mezquita de Al Aqsa, de donde surgió la actual intifada tras una visita del primer ministro israelí, Ariel Sharón.
Nuevas víctimas
El ejército israelí ha matado hoy a balazos a un agricultor palestino que iba hacia sus campos de cultivo en el distrito de Jenin, en Cisjordania. Ayer mató a un palestino de 14 años en la ciudad de Rafah, en el sur de la franja de Gaza, y a un supuesto activista del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamás) en una aldea al este de Ramala en circunstancias que hasta el momento no se han aclarado.
Por otra parte, anoche en Belén miembros de brazo armado de Al-Fatah asesinaron a Yarid Abu al-Adas, sospechoso de colaborar con los servicios de seguridad israelíes, informaron fuentes policiales.
