Cuatro personas se encadenan en la embajada de España en Panamá por un despido
Los despedidos eligieron el lugar porque en España "hay un hombre de leyes como el juez Baltasar Garzón"
Cuatro trabajadores despedidos en 1990 de su empresa han entrado en el jardín de la Embajada de España en Panamá y se han encadenado para exigir al gobierno panameño que cumpla una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Rolando Gómez, despedido del antiguo Instituto de Recursos Hidráulicos y Electrificación (IRHE), ha declarado que entraron de manera pacífica al patio lateral de la embajada "para llamar la atención del mundo y convocar la solidaridad internacional del movimiento obrero" sobre su caso.
Los trabajadores piden a la presidenta panameña, Mireya Moscoso, que cumpla la sentencia emitida por la CIDH el 2 de febrero de 2001, que condenó al Estado panameño a pagarles una indemnización.
El caso se refiere al despido de 270 empleados públicos panameños en 1990 por parte del entonces presidente Guillermo Endara, acusados de sedición, que la Corte consideró improcedente, por lo que condenó al Estado panameño a pagarles los salarios perdidos mas una indemnización. Panamá, de acuerdo con el fallo, debía retribuir inicialmente con 3.000 dólares a cada uno de los afectados, además de las indemnizaciones, pero los pagos se han hecho de forma incompleta y fuera de plazo, según los afectados.
Esperanzas puestas en Garzón
Gómez ha manifestado que entraron en el recinto de la Embajada porque ven que en España "hay un hombre de leyes como el juez Baltasar Garzón", y es un país que respeta los derechos humanos. También ha agregado que entregaron a funcionarios de la Embajada un documento en el que solicitan asilo político y económico a España, ya que "nuestras acciones han provocado roces y verdaderamente sentimos que no hay seguridad para nuestras vidas".
Gómez dijo que dependiendo de las condiciones y de las necesidades que tengan, determinarán si continúan o no con la protesta y si se declaran en huelga de hambre.
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