Daniel Arias: “Los apellidos dentro del trabajo no importan tanto”

“Soy un poco payasete”, reconoce entre risas el actor Daniel Arias (Madrid, 19 años). Sin embargo, durante la mayor parte de la entrevista se muestra muy formal, comedido y, ante todo, profesional. Sorprende ver esa sensatez en una persona de tan corta edad, que disfruta de la profesión por la que se ha decantado. No rehúsa hablar de su familia ­ —es hijo de Imanol Arias y Pastora Vega, además de hermano de Jon Arias—, pero tiende a desviar la conversación hacia su trayectoria incipiente en el mundo de la interpretación.

Estos días se encuentra en San Sebastián rodando la segunda temporada de El internado: Las Cumbres, serie de Amazon Prime Video inspirada en aquella de Antena 3 que dio a conocer a actores como Blanca Suárez, Yon González y Ana de Armas. Admite que para muchos de sus compañeros y para él, que interpreta el personaje de Eric, es el primer proyecto importante de sus carreras, aunque procura que el éxito no empañe sus objetivos profesionales. “No me apetece centrarme en cuánta repercusión va a tener el proyecto o cuánta gente lo va a ver. Al final lo que quiero es hacer un buen personaje, contar una buena historia y no pensar en si lo va a petar o no”, explica por teléfono. No obstante, desvela que ha leído alguna que otra reacción a través de las redes sociales: “Te escriben desde cualquier parte del mundo dándote las gracias por tu trabajo y diciendo que ver la serie les ha entretenido, les ha ayudado o que simplemente les ha gustado mucho. Es muy guay vivir eso”.

Poco amigo de la notoriedad y más del esfuerzo y el aprendizaje, continúa formándose y marca cierta distancia con su familia en el ámbito laboral: “Todo lo que pueda ganar como actor y todas las oportunidades a las que pueda optar que sean por mí, no por mi familia”. Pese a que rechaza la idea de presumir de apellidos, pues “dentro del trabajo no importan tanto”, de vez en cuando le toca batallar contra quienes no reconocen sus propios méritos: “Estoy acostumbrado a que cada vez que me cogen en un proyecto me digan que soy el enchufado”.

De hecho, sus intervenciones en Cuéntame cómo pasó, el trabajo más emblemático de su padre, podrían haber sido más, pero se limitan a dos: un monaguillo cuando tenía unos ocho años y, recientemente, un joven Antonio Alcántara besando por primera vez a Mercedes. Si bien al principio se mostró reacio a intervenir en este episodio de la última temporada por su empeño en labrarse su propio camino, no pudo rechazar la oferta cuando le explicaron que se trataba de un homenaje a la famosa pareja de la ficción y que le acompañaría la hija de Ana Duato, María Bernardeau, a la que considera una hermana.

Arias nació casi un mes después de que se estrenara la serie en 2001 y, por tanto, ha crecido a la vez que la trama, viviendo muchos momentos en el set de rodaje y entablando amistad con el reparto. Lo de la interpretación le viene desde la cuna, pero insiste en que la decisión de seguir ese rumbo fue propia: “El tener unos padres que se dedican a esto te hace mamarlo en casa. Pero al final, el que ha querido dedicarse a ser actor he sido yo”. Ya desde niño le picaba la curiosidad por el cine y quería ser “hacedor de películas”, como decía cuando tenía solo cinco años. Escribía sus propios guiones, creaba personajes y grababa cortos con sus amigos. Tocaba todos los palos y no supo que quería encauzar su vida concretamente hacia la actuación hasta que se puso bajo las órdenes de Álvaro de Armiñán en la película Segunda oportunidad (2018). “Me vi en un set de verdad, con un equipo de verdad, cumpliendo la función de intérprete… Ahí es cuando dije: ‘Lo que me gusta es estar delante de la cámara haciendo un personaje”, recuerda Arias, que a partir de aquella experiencia comenzó a acudir a la escuela de interpretación.

Focalizado en su faceta de actor, mantiene también la de director, guionista y productor, aunque de momento prefiere relegarlo a la categoría de pasatiempo. En 2016 creó con unos amigos la productora audiovisual FMF Productions y se aventuraron a grabar la serie web Paradero desconocido, en la que intervenían sus padres y su hermano, además de otros rostros conocidos como Paula Gallego (Cuéntame cómo pasó) y Miguel Bernardeau (Élite). Sin embargo, a las dos semanas de rodaje se percataron de que aquello les venía grande. “Era un poco caos y decidí abandonar”, comenta de aquel fallido proyecto, a lo que añade: “Tengo una espinita clavada con Paradero desconocido, pero ojalá algún día se pueda sacar adelante”.

Muy centrado en el momento que está viviendo, le cuesta pensar en el futuro, pero desvela que le gustaría trabajar con directores como Javier Ruiz Caldera o actores como José Coronado, entre otros muchos. Tampoco descarta volver a hacerlo con su familia, siempre que sea un proyecto que empiecen todos desde el principio, no un Cuéntame que lleva 20 años en pantalla. El éxito de la longeva serie despertó desde el principio un mayor interés por Imanol Arias y su familia, quien tras nacer el benjamín advirtió a la prensa: “Les presentamos a nuestro hijo para que le conozcan, le hagan las fotos que quieran y luego se olviden de él”. El veterano actor ha estado durante estos años muy presente en los medios de comunicación para lo bueno y para lo malo, ya sea por estrenos o por sus divorcios y sus problemas con Hacienda. Al respecto Daniel Arias se expresa distante y cauteloso: “Mi familia es mi familia y dentro de mi vida juega el rol de ser mi familia. No me importa más allá de eso lo que se diga por ahí”.