Mango, papaya y mascarpone en una receta para la que no necesitarás máquina heladera. Y que podrás cocinar como si fueras un concursante de 'Adán y Eva': en bolas.

Una ensalada fresca, nutritiva y que aprovecha ingredientes locales para combatir el calor que empieza a asomar la patita

El 'naan' es un pan muy típico de algunas regiones de Oriente Medio. Si no tienes un horno tandoor para hacerlo, siempre puedes comprarlo en alguna tienda especializada y acompañarlo de esta rica escalivada de verduras.

Si no te gusta el pepino o te sienta mal, ésta es la ensalada que te reconciliará con esta hortaliza. Otra buena noticia: se tarda exactamente cinco minutos en hacerla.

Moje murciano.

Una receta rápida de pescado azul que podemos cocinar en sartén, a la brasa o al horno acompañada de una ensalada de hinojo y un aliño a base de granos de mostaza

El albaricoque es una de las frutas que menos utilizamos para cocinar, y nos lo estamos perdiendo. Porque a mordiscos está muy rico, pero acompañado de tomate, feta y un aliño fresco directamente es la bomba.

Combate el calor y sus sudores infernales a ritmo de zumos, batidos u otros refrescos caseros sin ningún dulzor añadido. Tan sólo hay que tirar de imaginación y frutería.

Esta receta entra directamente en la categoría de 'jetapostre'. ¿Sabes remover? Pues entonces puedes preparar estos vasitos llenos de fruta fresca y sabrosa.

Ensalada pantesca con caballa.

Adaptamos un gran éxito de los postres a los días más calurosos utilizando crema diplomática. Nuestra receta incluye una opción para vagos y otra un poquito más complicada

Metemos esta tarta clásica en un vasito y aligeramos su textura y su untuosidad con un toque ácido y otro especiado: un jetapostre perfecto que se hace con la gorra y gustará a todo el mundo.

Lasaña sin horno.

Tanto si celebras Halloween como el Día de Todos los Santos o, en México, el Día de Muertos, tienes que probar esta tarta, que te elevará a los cielos por su sabor y cremosidad.

Las berenjenas al vapor quedan tiernas y perfectas para servir en platos fríos. Las acompañamos de un salteado de frutos secos y una base de yogur cítrico que redondea la receta.

Dados de carne adobada con una mezcla de hierbas y especias, cocinados hasta quedar dorados por fuera pero tiernos por dentro: la versión casera de este clásico de bar merece el -poco- esfuerzo.

¿Cómo se puede mejorar un mar y montaña?¿Cómo se le puede dar una vuelta a la escudella catalana para no servir otro año lo mismo? ¿Por qué no le ponemos un huevo frito? Las tres respuestas, aquí (y en La Falconera).