Untable de pizza
Puedes ponerle cualquier cosa que originalmente quede bien sobre la clásica receta italiana, pero en lugar de ponerte con las manos en la masa, lo sirves con unas tostadas de buen pan y dejas que tus invitados unten como si no hubiera un mañana.
“Fare la scarpetta”, según he revisado en el Diccionario Treccani de la lengua italiana, es el “acto de recoger la salsa que ha quedado en un plato con un trozo de pan en un tenedor o entre los dedos”. Vamos, untar, pero a la italiana. Esta es una de las acciones más satisfactorias que hay, así que ¿por qué no hacerla un plato en sí mismo? Este, pensado para comerlo untando y remojando pan sobre él, es uno diseñado específicamente para esta manera de comer.
Después de probar esto en casa, puedo decir que esta receta es casi como una pizza en plato. Los puristas del borde napoletano y de la masa de alta hidratación estarán empezando a llevarse las manos a la cabeza. Lo siento: si alguien tiene una forma más ocurrente para designar una elaboración deliciosa, con base de salsa de tomate, burrata, orégano y otros ingredientes que quedarían genial sobre una pizza, y que además se unta sobre pan tostado, que me lo diga y lo cambio.
Disputas sobre el nombre aparte, puedo asegurar que no va a haber discusión cuando se sirva este plato sobre la mesa. Aunque sí habrá interacción: los comensales pueden jugar, probar y mezclar a su voluntad, compartiendo un momento, pero no siempre los mismos sabores. Uno coge más de un lado, otro prefiere no ponerse aceitunas, alguno quiere un poco más de picante… una fiesta.
Este plato-que-sabe-a-pizza porque lleva sus ingredientes más identificativos y se come con pan es tan divertido de comer como de preparar. En esta versión hemos elegido algunos ingredientes clásicos -una salsa de tomate buena, burrata, pesto, alcaparras y aceitunas- pero hay cabida para todo tipo de combinaciones. Por nombrar algunos que quedarían igual de bien: unos cherrys salteados con ajo o tomates deshidratados, anchoas, speck, alcachofas conservadas en aceite, guanciale crujiente, setas salteadas, queso pecorino rallado, gorgonzola… Si no se te ocurren ideas, acude a la carta de tu pizzería de confianza y elige algunos ingredientes para mezclarlos.
Tiempo: 40 minutos
Dificultad: Ninguna.
Ingredientes
Para 3 o 4 personas (como entrante)
- 1 burrata
- 200 ml de tomate triturado o passata
- 3 dientes de ajo
- 3 cucharadas de pesto
- 1 cucharada de orégano
- 30 g de aceitunas negras
- 2 cucharadas de alcaparras
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta negra
- Rebanadas de pan de hogaza tostado al gusto
Instrucciones
Poner dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra y los dientes de ajo sin pelar en una sartén. Cocinar a fuego medio hasta que se doren.
Añadir el tomate, media cucharadita de sal y pimienta negra. Cocinar unos 20-30 minutos a fuego medio, removiendo de vez en cuando.
En otra sartén calentar dos cucharadas de aceite, añadir las alcaparras y las aceitunas y cocinar durante cinco minutos. Fuera del fuego añadir el orégano y mezclar bien.
En un plato amplio servir la burrata abierta, colocar el pesto, un par de cucharadas de salsa de tomate -o más-, el sofrito de alcaparras y aceitunas y terminar con un poco de pimienta molida.
Tostar el pan y comer untando en el plato.
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