Panzanella de melocotón y tomate
Los últimos melocotones y tomates de temporada hay que aprovecharlos en ensaladas como esta, en la que los picatostes dan un toque crujiente. Si no encuentras halloumi -un queso chipriota- puedes usar burrata o mozzarella.
Desde hace un par de años cuando llega el verano sólo pienso en melocotones, maduros, aromáticos y jugosos. Durante el curso voy recopilando y anotando ideas y recetas hasta que llega su temporada para poder hacerlas (por suerte esta se alarga gracias a las variedades más tardías, como el delicioso melocotón de Calanda, que suele acompañarnos hasta entrado el otoño). Esta ensalada es una de ellas, crujiente, deliciosa y llena de sabores y matices.
El origen de la ensalada panzanella -pane, pan en Italiano, y zanella, plato hondo en el que se sirve- data del siglo XVI en la Toscana italiana. Si se podía mejorar una ensalada es, lógicamente, añadiendo unos picatostes de buen pan convenientemente tostados para que queden bien crujientes (Italia, cuna del carbohidrato, te quiero). Depende de dónde vivas y de cómo se esté comportando el verano puede ser un rollo encender el horno a estas alturas del año, pero ese crujiente es esencial y absolutamente necesario. Si no tienes horno, o no quieres usarlo, también puedes utilizar pan de víspera y tostarlo en una sartén a fuego medio; no tengas prisa o se te quemará y no queremos eso.
El halloumi es un queso chipriota que puedes encontrar ya en muchos supermercados: lo llaman el bacon de los vegetarianos por su textura y sabor salado y está delicioso a la plancha, si no lo encuentras puedes utilizar una buena burrata o mozzarella en su lugar, o incluso un poco de feta desmigado, no será igual pero también estará muy rica.
Ingredientes
Para 4 personas
- Unos 100 g de buen pan (yo uso de masa madre)
- 2 melocotones maduros (o nectarinas)
- 500 gramos de tomates maduros ricos y jugosos (por ejemplo rosa de Barbastro)
- El zumo de un limón
- Un puñado de hojas de albahaca fresca
- Un paquete de queso halloumi (o una burrata o mozzarella grandes)
- 2 cucharadas de semillas de mostaza o mostaza antigua
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal (si puede ser, Maldon)
- Pimienta negra recién molida
Instrucciones
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