Menú para hoy: La mejor patata cocida se hace en el micro
En pleno enclaustramiento, inauguramos sección diaria para disfrutar de la cocina en casa. Una técnica sencilla pero poco conocida, sus aplicaciones en recetas concretas, y un menú completo de comida y cena.
Nuestras mascotas todavía no terminan de creerse que estamos todo el día a su disposición, pero a nosotros el confinamiento ya se nos está haciendo más largo que un viaje a Marte (a pedales, ida y vuelta). Pronto llegará el momento de ponerse a hacer la comida o la cena; si no llega, mira el reloj o escucha a tu estómago, que a veces en estas circunstancias tan extrañas perdemos la noción del tiempo. Hoy también proponemos una técnica que puede hacerte la vida más sencilla; tan simple como nuestra protagonista: la patata.
La mejor patata cocida se hace en el micro
Soy consciente de que los haters del microondas se enfurruñarán y desconectarán con esta propuesta, pero es que es la pura realidad: la patata cocinada en este electrodoméstico es superior a la cocida, porque concentra su sabor, presenta una textura perfecta… y gastas menos tiempo y energía (ergo dinero). Se pueden hacer en un estuche de silicona o en un simple plato hondo tapado con otro: lo fundamental es elegir una clase adecuada para cocer -monalisa y kennebec, bien; agria, mal- y poner un poco de agua en el fondo para que las patatas se hagan con el vapor y no queden securrias.
¿Cómo se preparan?
Pelas y cortas las papas en trozos medianos, les echas una pizca de sal por encima y las pones siete u ocho minutos a potencia máxima. Dejas un par de minutos más de reposo sin destapar y, tal y como las destapes -para que absorban bien el sabor-, las aliñas con un buen aceite de oliva virgen extra, pimentón o las especias y hierbas que te dé la real gana… y magia.
¿Qué puedo cocinar con ellas?
Si mientras se hacen cueces un huevo durante nueve minutos -poniendo el huevo en el momento en el que el agua hierva, para que no se resquebraje es importante que esté a temperatura ambiente- y después lo enfrías, podrás preparar preparar unas deliciosas papas aliñás, al estilo de Cádiz. Solo tienes que aliñarlas, cuando aún estén calientes para que la cebolla pierda fuerza, con cebolla picada en grueso, aceite, vinagre, sal y pimienta; cuando estén a temperatura ambiente, remata con los huevos troceados y abundante perejil. La ensalada de pulpo también es una opción si tienes unas patas de este cefalópodo a mano.
La patata cocida es un lienzo en blanco sobre el que puedes trabajar a capricho: si las doras en una sartén con un poco de aceite, junto con unas setas -champiñones, gírgolas- un poco de ajo y, finalmente, y un par de huevo revueltos, tendrás un plato único muy interesante (aquí debajo tienes la técnica más sencilla para prepararlos perfectos).
Si las doras un poco más puedes quitarte la morriña de ir de bares, y montarte un estupendo vermut en casa con esta receta de mayonesa tuneada con sriracha y lima, ajo dorado y perejil o naranja y pimentón (o una mezcla de las tres). También puedes convertirlas en puré fácilmente: calienta leche en el mismo microondas -la nata, la mantequilla o el aceite de oliva también sirven, se trata de aportar un poco de grasa para conseguir una textura más amorosa- y aplasta con un tenedor y un poco de ganas.
Comparte tu fotos de platos o trucos para comprar y cocinar durante el confinamento con la etiqueta #comidistaconfinado, y descubre más técnicas, trucos y menús diarios aquí.
¿QUÉ COMEMOS HOY?
COMIDA
Crema de guisantes con aceite de menta y mozzarella
Papas aliñás
Naranja
CENA
Ensalada tibia de lentejas y boniato asado
Tortilla francesa con cebolla dulce
Helado rápido de pomelo, plátano y menta
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