Ocho platos fáciles para hacer con un bote de pimientos en conserva

En este país disponemos de un lujo que, por haber nacido inmersos en él —el pez no ve el agua—, con frecuencia no se aprecia: las magníficas conservas vegetales que encontramos en todos los comercios. Entre ellas nos ocupamos en este artículo de los pimientos asados, tanto morrones como del piquillo, que la conserva pone cómodamente a nuestro alcance, ahorrándonos la tarea de asarlos y, sobre todo, pelarlos, que es una castaña importante.

El asado saca a relucir todo el dulzor que llevan dentro los pimientos, convirtiéndolos en un complemento o base magníficos para todo tipo de combinaciones culinarias. El pimiento es sabrosísimo y versátil, y os lo vamos a demostrar con el puñado de ideas que os damos a continuación. De nada.

Ideas con pimientos del piquillo

Los pimientos del piquillo son una exquisitez con la que podemos preparar platos magníficos, tanto con el pimiento entero como en las clásicas fórmulas de piquillos rellenos como estos con merluza y gambas, como con la versión en tiras, perfecta para ensaladas. Si quieres tener claro cuáles son los pimientos del piquillo genuinos que cumplen con todos los requisitos de la Denominación de Origen Lodosa y cuáles son de menor calidad y por qué, nuestra compañera Rosa Molinero te lo cuenta todo en este artículo. A continuación, te damos tres ideas en orden creciente de complicación.

Pimientos del piquillo confitados

Empezamos por lo más sencillo que puedes hacer con un tarro de piquillos, que es confitarlos con un sencillo acompañamiento de ajo y aceite. Los pimientos se consumen y sus jugos se concentran reduciendo al pimientito a su esencia. El sabor final es espectacular.

Ensalada de piquillos, tomate y cebolla

En esta ensalada, para la que empleamos la modalidad de piquillos en tiras, contrasta el dulzor del pimiento y la naranja, y la sabrosura del tomate con el sabor intenso de la cebolla, una pizca rebajado macerando la cebolla cortada en zumo de cítrico.

Pimientos rellenos de brandada de bacalao

Ya que la brandada de bacalao es uno de los platos más suculentos que existen, es una magnífica idea embutirla en unos excelentes pimientos del piquillo y servirlos sobre una rica salsa, como en la siguiente receta que debes reservar para cuando quieras impresionar a alguien de cualquier índole y ralea. Hay voces que tachan de viejunos a los pimientos rellenos, pero no debes escucharlas. Como ya sabes preparar la brandada porque te la enseñamos aquí, el resto es coser y cantar. O casi.

Ideas con pimientos morrones

De las ensaladas variadísimas como el esgarraet valenciano a todo tipo de mejunjes para mojar pan cual si no hubiera un mañana, con el pimiento triturado o sin triturar, pasando por tostas con quesos fundidos, el pimiento morrón asado en conserva es un ingrediente que nos soluciona muchas papeletas cociniles.

Tosta de pimientos y queso Arzúa-Ulloa

Aún a riesgo de que algún gallego se nos ofenda, el queso Arzúa-Ulloa funciona a las mil maravillas fundido —como en estas minipizzas—, por lo que va de cine en tostas que podemos acompañar con lo que queramos. Con una capa de tiernos pimientos asados, el resultado es fantástico.

Hummus de pimientos asados

El ubicuo hummus que tan popular se ha hecho en nuestro país en los últimos años se puede preparar con pimiento morrón asado, fíjate tú, añadiendo verdura a la legumbre. Un moje de lo más completito y sabroso.

Muhammara, moje de pimiento y nueces

La muhammara, originaria de la ciudad siria de Alepo, es un riquísimo moje al que dan consistencia las nueces. Prepárate a mojar esta combinación de verdura y fruto seco con pan a tutiplén.

Ensalada de pimientos asados y caballa

Hay fórmulas que resultan suculentas con una complicación mínima, como esta ensalada en que combinamos una conserva de pimientos con una conserva de pescado azul, que tienes poco más que hacer que abrir las latas, servir en un plato y regar con un buen aceite de oliva virgen. La caballa es menos popular que el ubicuo atún o bonito en las ensaladas patrias, pero es un pescado muy sabroso y saludable. Si a pesar de sus virtudes no te convence, existen otras alternativas como la melva, por variar del sempiterno bonito.

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