Juli Fernàndez: “La magia no existe, Rodalies no funcionará de maravilla porque lo gestione la Generalitat”
El consejero de Territorio defiende el bloqueo del Govern a la ampliación del aeropuerto de Barcelona pero descarta que Junts y el PSC puedan esgrimirlo para tumbar los presupuestos catalanes
Especialista en pócimas y recetas gracias a su formación como farmacéutico, Juli Fernàndez (Sabadell, 46 años) busca la fórmula que resuelva los nudos que cortocircuitan la movilidad en Cataluña. Logró ser alcalde de Sabadell tras unos resultados que le dieron a Esquerra cuatro concejales sobre 27, por lo que se le presupone buena mano a la hora de cerrar pactos. Esquiva responder si en el Govern se trabaja mejor desde que Junts partió, pero defiende que la política solo tiene un sentido: “Ser útil y hallar soluciones para la ciudadanía”.
Pregunta. El Govern arranca el año sin el presupuesto aprobado. ¿Trastoca mucho los planes a la consejería de Territorio?
Respuesta. Siempre es mejor tener el presupuesto aprobado el 1 de enero, pero esperamos que la prórroga sea por un periodo corto de tiempo y vamos a tratar de hacer la mejor gestión posible. No se trata tanto de si afecta a nuestra gestión como de si afecta a la vida de la gente. Me cuesta entender que, si no es por cuestiones particulares, tanto el PSC como aquellos que hicieron la mayor parte de estos presupuestos no los aprueben.
P. ¿Los van a acabar aprobando con el PSC?
R. Esperemos que sean los más amplios posible. De momento, con los comunes ya tenemos un acuerdo.
P. El Govern alega que este proyecto de presupuestos cuenta con el apoyo de los agentes económicos y sociales. Son los mismos agentes económicos que abogan por la ampliación del aeropuerto de Barcelona-El Prat y que Esquerra no atiende?
R. Lo que quiere hacer el Govern con las infraestructuras es liderarlas desde una mirada real y viable. Es menester incorporar el contexto en el que vivimos en el diseño de las infraestructuras. Y en el caso del aeropuerto este contexto no estaba incorporado.
P. Aena dice que si se gasta 1.700 millones en el proyecto de ampliación de la tercera pista es porque ha estudiado todas las posibilidades y esa es la única posible. ¿No es verdad?
R. Cualquier proyecto de mejora sería una realidad dentro de unos años, pero el aeropuerto de Barcelona necesitará una gestión específica el próximo verano, porque las previsiones apuntan a que recupera los niveles de actividad de antes de la pandemia. La propuesta de ampliación de Aena no responde al contexto que estamos viviendo ni a la protección de los espacios naturales del entorno metropolitano. Tampoco respeta la normativa europea de protección de humedales. La propuesta no es real ni viable.
P. A su predecesor en la consejería le parecía bien.
R. El Govern de la Generalitat no llegó a ningún acuerdo para que fuera posible.
P. Aeropuerto, complejo turístico Hard Rock y Cuarto Cinturón. Son tres escollos que alegan tanto Junts como el PSC para apoyar el presupuesto y que dependen de su consejería. ¿La responsabilidad recae en el Departamento de Territorio?
R. No son temas equiparables. En el caso del Hard Rock hay un plan director urbanístico aprobado desde el año 2016 y existe una sentencia judicial que manda modificarlo. Por lo tanto, hay una tramitación administrativa y se trata de ser solvente con las alegaciones desfavorables. El Govern trabaja para resolver esas alegaciones. Quizá hay interés en hacer ruido, pero la tramitación se está haciendo.
P. ¿Y el Cuarto Cinturón?
R. Es un proyecto de hace 60 años que no resuelve nada. Lo que hemos trasladado a los alcaldes es que por primera vez la Generalitat aborda su responsabilidad de mejorar la movilidad en el Vallès. A través de carreteras que son de titularidad de la Generalitat se mejora la conexión desde Castellar del Vallès a la C-58 y se conecta Sabadell y Terrassa ampliando la N-150.
P. ¿Criticar Rodalies y defender Ferrocarrils de la Generalitat es un mandato que asume cada consejero de Territorio al acceder al cargo?
R. Me encantaría que Rodalies funcionase bien. Las comparaciones son odiosas, pero firmaría que los usuarios de Rodalies sufriesen las mismas incidencias que los de FGC.
P. Es el consejero de Territorio, ¿no tiene ninguna responsabilidad en el mal funcionamiento de Rodalies?
R. Por desgracia no tengo la capacidad para hacer que Rodalies funcione bien.
P. ¿Y qué hay que hacer?
R. Asumir todas las responsabilidades para intentar ayudar a la gente que cada mañana sufre el mal servicio. Yo no quiero excusas, quiero responsabilidades y construir un sistema ferroviario de país, donde todas las redes formen parte de una misma y que la Generalitat tenga la capacidad de gestionarla. Estaría encantado de asumir el desgaste que pueda suponer gestionar Rodalies.
P. ¿El traspaso de Rodalies a la Generalitat se concretará algún día?
R. El problema no es solo la gestión, también hay que tener los recursos de inversión para mejorar la infraestructura. Y, si no tenemos la capacidad de ejecución de los recursos, Rodalies seguirá funcionando mal. La magia no existe, Rodalies no funcionará de maravilla porque lo gestione la Generalitat. Pero, si somos capaces de construir un escenario donde tengamos la gestión del servicio, las inversiones y la capacidad de ejecutarlas, ese horizonte es mejor del que tenemos hoy. No se trata de una cuestión política, nuestro objetivo es buscar mejoras para la vida de la gente.
P. Desde la Generalitat se quejan que el Estado solo ejecuta un 36% de las inversiones que había presupuestado en Cataluña, pero en el Congreso Esquerra le aprueba los presupuestos al Gobierno. ¿Es una contradicción?
R. El problema lo tiene quien no ejecuta, no quien logra recursos. En los nuevos presupuestos hemos logrado 900 millones más para infraestructuras e introducimos la fórmula de la encomienda de gestión para que quien ejecute sea la Generalitat.
P. Territorio controla FGC que, a su vez, gestiona seis estaciones de esquí. ¿Con la emergencia climática tiene sentido subvencionar con dinero público unas instalaciones que requieren recursos medioambientales para poder operar?
R. Las estaciones son una actividad económica muy importante para su entorno. Hay que construir soluciones ideales y viables para el futuro, y la idea es que las estaciones vayan más allá de la nieve y lideren transformaciones económicas de los territorios de montaña.
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