El sindicato Ustec alerta de que muchas bajas del profesorado no se cubren en las escuelas de Cataluña

El sindicato Ustec·Stes, el mayoritario en el sector educativo, denuncia que, en los últimos cinco días, el volumen de bajas de profesorado no cubiertas supera a las que sí han encontrado sustituto. Su portavoz, Iolanda Segura, alerta de que la situación “es crítica” y que este desajuste está generando muchos problemas y “sobrecarga de trabajo” en los centros educativos. El Departamento de Educación, por su parte, asegura que, si una baja no se cubre un día, se vuelve a convocar al día siguiente.

Según los datos ofrecidos por el sindicato, este lunes no se cubrieron 1.343 plazas (un 51,4% del total), frente a las 1.270 bajas que sí se resolvieron. El peor día fue el jueves 20, cuando el 68,57% quedaron sin sustituto (1.669 de un total de 2.434), siempre según la organización. Educación niega las cifras de Ustec, pero no facilita las oficiales y se limita a asegurar que, si las bajas no se cubren un día, se ofertan de nuevo al día siguiente. “Esto no quiere decir que no se cubran nunca, sino que no se han podido cubrir en menos de 24 horas”.

Sea como sea, lo que sí admite Educación es que el nivel de sustituciones, y de bajas, es “histórico”. Según los últimos datos del portal Traçacovid (que recoge el impacto de la pandemia en los centros educativos), actualmente hay 8.849 profesores y administrativos confinados. Del 7 al 21 de enero se han designado 9.335 suplentes y se realizan nombramientos diarios (antes se hacía tres días por semana). La falta de sustitutos ha obligado a abrir la bolsa y flexibilizar los criterios para buscar nuevos reemplazos.

A la escuela Anxaneta de Mataró no han llegado todos los sustitutos. Este martes, de ocho bajas solo tenían dos cubiertas. Pero la semana pasada fue peor: 14 bajas de una plantilla de 39. “Fue horroroso”, admite Marta Tejedor, maestra de primaria. “Hicimos de todo: el tener cuatro profesores de refuerzo covid nos ayudó, pero también recurrimos a los profesores que tenían el grupo confinado, de horas de todos los maestros e incluso del personal que atiende a los alumnos con necesidades especiales. Los maestros siempre lo acabamos logrando, pero a costa de un estrés enorme”, añade.

Toda esta reestructuración constante no ayuda a la gestión de los alumnos, cuya situación no es tampoco sencilla. En este centro tenían este martes 93 estudiantes positivos (de 400) y siete de 22 grupos cerrados. “Es un goteo constante de positivos, pero también de alumnos que se reincorporan tras las cuarentenas, nunca está la clase entera y tienes que combinar las clases presenciales con las telemáticas”, tercia Tejedor. La maestra alerta de las consecuencias en la calidad de la enseñanza. “No se está avanzando materia al ritmo habitual. Si esto sucede una semana no pasa nada, pero si se alarga mucho sí que repercutirá mucho en los alumnos”.

Desde Ustec advierten de que la falta de sustitutos está provocando que clases queden desatendidas, que se mezclen grupos y que, al final, las escuelas acaben haciendo de “guardería”. “Las direcciones hacen de gestores covid, de 061, gestionan bajas y apagan fuegos. Esto pasará factura, nadie está pensando en la salud emocional de los profesionales”, remacha Segura.