Los contagios de covid se disparan en las escuelas catalanas: los positivos diarios doblan los de la semana pasada
El consejero de Educación: “Aguantaremos tanto como sea necesario. Pasarán unos días, pero esto bajará”
La pandemia sigue castigando con fuerza los centros escolares y se siguen llegando a cifras de contagios nunca vistas: el miércoles se batió el número de positivos, llegando a casi 23.000 en un solo día, una cifra que dobla los registrados diariamente durante la semana pasada. El consejero de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, admitió este jueves que las escuelas están viviendo un momento “difícil” y “complejo”, pero insistió en que “no peligra el cierre de las escuelas” porque considera que pronto la curva epidemiológica cambiará de rumbo. “Aguantaremos tanto como sea necesario. Pasarán unos días, pero esto bajará”, remachó.
Administración y expertos suelen remarcar que lo que pasa en las escuelas no deja de ser un reflejo del exterior. En Cataluña el gráfico de contagios sigue marcando una línea ascendente, sumando 51.993 positivos y 54 muertes en las últimas 24 horas, según el último recuento hecho por el Departamento de Salut este jueves. En cuanto a los pacientes ingresados actualmente, la cifra se sitúa en 2.703, 85 más que en el último recuento. De este total, 502 se encuentran en unidades de cuidados intensivos. El riesgo de rebrote (EPG), que mide el crecimiento potencial de la epidemia, vuelve a batir el récord y se sitúa en 5.935 puntos, 196 puntos más que el día anterior. No obstante, la velocidad de propagación de la enfermedad (Rt) sigue desacelerándose lentamente y se ha situado en 1,21, una centésima menos. Con todo, la Generalitat ha decidido empezar a relajar algunas de las restricciones, empezando con la eliminación del toque de queda este viernes.
En las escuelas, según la última fotografía que dibuja el portal Traçacovid -que corresponden a cifras del miércoles- se produce una aceleración en los contagios. En un solo día se registraron 22.970 positivos más que el día anterior (20.843 alumnos y el resto, profesorado), cifra que duplica los de la semana pasada, cuando se detectaban entre 11.000 y 13.000 contagios diarios. Asimismo, actualmente hay 120.277 personas confinadas, de los cuales 111.786 son alumnos (un 7,76% del total) y 8.491 son docentes, administrativos y personal externo.
El consejero Cambray reconoció que el crecimiento de contagios es “vertiginoso” y que el virus “está arrasando en la sociedad, y también en las escuelas”. Asimismo, admitió que esto está produciendo “tensión en el sistema educativo”, pero volvió a rechazar la idea de cerrar las escuelas. “La escuela hay que hacerla desde la escuela. Si confinásemos grupos, la gestión sería más fácil, pero que los niños puedan ir a escuela es un valor añadido”, aseguró en varias entrevistas concedidas a radios y televisiones. Y añadió: “Aguantaremos tanto como sea necesario. Pasarán unos días, pero esto bajará”.
El alto volumen de bajas entre el profesorado está siendo un quebradero de cabeza para las direcciones y Cambray admitió que los sustitutos que actualmente hay en la borsa “no son suficientes” y que “hay algunos que no se cubren”. Educación se niega reiteradamente a facilitar el porcentaje de bajas sin cubrir. Para afrontar esta situación, el Departamento realiza nombramientos diarios de sustitutos -hasta ahora se hacían tres días a la semana-, y ya se han designado 8.020 desde el 7 de enero. Además, se ha abierto la borsa para inscribir nuevos candidatos (ya hay un millar). Y de cara a la concertada, que está teniendo más problemas para contratar sustitutos (no los nombra Educación, sino que cada escuela gestiona los contratos), el Departamento les autorizará para que los profesores de secundaria puedan hacer clases en primaria.
Cambray también admitió “disfunciones” y “desajustes” en la realización de los test de antígenos gratuitos a los alumnos cuando se produce un positivo en clase. Muchas familias se quejan de la lentitud en la tramitación y que la receta para poder hacer la prueba tarda más días de los debidos, tanto que en algún caso se ha dejado de hacer el test porque había pasado los cuatro días desde la detección del positivo que indicaba Salud, un plazo que se ha ampliado hasta siete días debido al colapso del sistema.
Sobre la vacunación, el consejero aseguró que se ha puesto sobre la mesa la posibilidad de convertir algunas escuelas como punto de vacunación masiva, pero que ello depende de que “Salud tenga la logística”.
Cambray también se lía con el protocolo
Una de las quejas más habituales entre familias y docentes es la poca claridad del protocolo, las modificaciones constantes y los detalles contradictorios. La normativa es tan enrevesado, que hasta el propio consejero se ha equivocado en dos ocasiones. En la primera, a preguntas de una oyente, ha asegurado que un alumno confinado puede acudir a una actividad extraescolar, afirmación que ha tenido que corregir. La segunda hace referencia a una de las pautas que más estupor causa entre las familias: cuando un alumno de infantil y primaria es contacto de un positivo en clase no debe hacer cuarentena, pero si el positivo es alguien del domicilio familiar, sí debe confinarse. Cambray ha asegurado que en ambos casos el alumno puede asistir a escuela, pero minutos más tarde el presentador ha tenido que matizar que solos los inmunizados se salvan de la cuarentena.
