Tráfico instalará 88 nuevos radares este 2024, la mayoría de tramo y en vías secundarias

Tráfico ha anunciado este lunes que instalará 88 nuevos radares en las carreteras españolas durante este año, un 60% de ellos de tramo. La mayoría de los nuevos dispositivos de control de velocidad se colocarán en vías convencionales, donde ocurren 7 de cada 10 siniestros mortales. Todavía es pronto para conocer las ubicaciones exactas, según fuentes de la Dirección General de Tráfico. Este incremento se ha hecho público coincidiendo con una campaña de control de velocidad que durará una semana y que forma parte de una iniciativa europea promovida por la asociación de policías de tráfico RoadPol. La campaña se desarrollará entre este lunes 15 de abril y el próximo domingo 21 de abril y en ella participarán agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y policías locales adheridos a esta iniciativa.

El aumento de radares en las carreteras españoles supone un crecimiento de un 6,7% sobre los dispositivos que la Dirección General de Tráfico (DGT), dependiente del Ministerio del Interior, gestiona en las carreteras españolas. Actualmente, cuentan con 711 puntos fijos de control de velocidad, 76 de tramo y 525 radares móviles. Las competencias de tráfico están transferidas en Cataluña, País Vasco y Navarra, donde comenzaron a gestionar las carreteras el pasado julio y habrá un periodo —inferior a cinco años— durante el que Policía Foral y Guardia Civil seguirán ejerciendo conjuntamente las labores de control del tráfico en carretera.

Los controles de velocidad que se realicen durante esta semana estarán anunciados mediante paneles de mensaje variable o con señalizaciones verticales, ya que se trata de una campaña preventiva. El objetivo es reducir no solo los accidentes en carretera por exceso de velocidad, sino también las lesiones que se producen en este tipo de siniestros.

La velocidad inadecuada es el tercer factor más habitual en los accidentes de tráfico, especialmente en los que tienen víctimas mortales. El año pasado se registraron 211 siniestros con fallecimientos en los que este factor estuvo presente. “El cumplimiento de los límites de velocidad legal no es solo una obligación legal, sino también una responsabilidad moral”, ha incidido el subdirector general de gestión de la movilidad y tecnología de la DGT, José Ruiz Boada.

La velocidad en carreteras convencionales es uno de los campos en los que España debe mejorar, según los resultados del Proyecto Baseline, un programa de seguridad vial del que forman parte 18 países y con el que se quiere realizar un seguimiento en los progresos de seguridad. El cumplimiento del límite de velocidad en las carreteras convencionales es del 43%, un nivel bajo, similar al que registra Bélgica. Sin embargo, en autovías y vías urbanas se sitúa por encima de la mayoría de países europeos.

En vías urbanas con límite de 50 kilómetros por hora, el nivel de cumplimiento de la velocidad por parte de turismos es de un 65%, el tercer valor más alto de los 13 países con los que compartimos límite y en las calles de 30 kilómetros por hora, el nivel de cumplimiento es del 32%, el valor más alto de los tres países para los que se dispone de datos.

Todos los vehículos matriculados nuevos a partir del próximo 6 de julio deben contar con una serie de funciones de seguridad avanzadas, las denominadas ADAS, entre las que se encuentra el Asistente Inteligente de Velocidad (ISA). Este sistema muestra el límite de velocidad de la vía por la que se circula, y un sistema de reconocimiento de señales que detecta limitaciones temporales de velocidad y ayuda al conductor a conocer y respetar los límites de velocidad.