Muere un hombre por un golpe de calor en Cartagena y la Guardia Civil investiga si estaba trabajando en un invernadero

Un hombre marroquí de 42 años murió el martes de un golpe de calor en el hospital Santa Lucía de Cartagena (Murcia), al que fue trasladado tras desplomarse en una calle en Mazarrón, ha confirmado dos días después, este jueves, el Gobierno murciano. El golpe se produjo el martes, durante el segundo día de una ola de calor que afectó especialmente al centro, sur y este de la Península y a Baleares. Se trata del primer muerto este verano por esta causa en Murcia, al que se suman otros tres casos graves en la Comunidad de Madrid registrados el miércoles.

La víctima de Murcia ingresó en el hospital cartagenero tras desplomarse en el suelo, inconsciente, sobre las 17.50 del martes, cuando se encontraba en la pedanía de La Majada. Un vecino lo vio y llamó al 112 para pedir ayuda, según informa La Opinión de Murcia. Al lugar acudieron agentes de la Policía Local, así como una unidad móvil de emergencias, cuyos sanitarios trasladaron al hombre al hospital Santa Lucía de Cartagena, donde llegó en estado crítico e ingresó en la UCI. Allí murió horas después. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para que se le practique la autopsia. Según el mismo diario, la Guardia Civil investiga las circunstancias de la muerte y si la víctima era un jornalero que se encontraba trabajando en un invernadero cuando sufrió el desvanecimiento.

El portavoz del Gobierno murciano, Marcos Ortuño, ha confirmado el fallecimiento y ha hecho una llamada a la prevención por las altas temperaturas, ante las que “se debe prestar una especial atención a las personas más vulnerables, como son las personas mayores, los enfermos con patologías crónicas o los niños”. Preguntado por si se pudo producir en el ámbito laboral, Ortuño ha recordado que la inspección de trabajo de la Seguridad Social es el organismo competente en el control de las medidas de seguridad de las empresas. “Obviamente, desde el Gobierno regional colaboramos con este organismo de una manera activa. Conviene recordar que este año la inspección de trabajo adelantó la campaña de inspecciones un mes debido precisamente a las altas temperaturas”, ha añadido el portavoz murciano.

El martes, en Mazarrón, la máxima fue de 36,5° tras una noche tórrida, en la que los termómetros no bajaron de 25,6° ―lo que recibe el nombre de noche tórrida o ecuatorial― y la región estaba bajo aviso naranja, el segundo de una escala de tres, por altas temperaturas. Este nivel de aviso implica que existe un riesgo meteorológico importante por fenómenos no habituales y con cierto grado de peligro para las actividades usuales.

El miércoles, último día de la ola de calor, se registraron tres casos graves de golpes de calor en la Comunidad de Madrid, que fueron atendidos por Summa 112, el Servicio de Urgencias Médicas de Madrid, dos de ellos en la capital en sus propios domicilios y una tercera víctima en la calle en Alcalá de Henares. Según ha informado este jueves un portavoz de Emergencias Comunidad de Madrid 112, los tres atendidos fueron trasladados en estado grave, con temperaturas muy altas y entubados a distintos hospitales, aunque no se teme por sus vidas. Toda la Comunidad de Madrid se encontraba ese día bajo aviso amarillo por altas temperaturas, en el que se recomienda no trabajar al sol o realizar ejercicio físico al aire libre en las horas centrales del día.

En la capital, donde la estación de Retiro marcó una máxima de 37,5° tras una noche con una mínima de 25,3°, se atendió a un hombre de 54 años y a una mujer de 76 años. El primero fue asistido en su casa, en la calle Generosidad del distrito de Villaverde, sobre las siete de la tarde, a donde acababa de llegar de trabajar todo el día en la cocina de un restaurante. A la llegada de los sanitarios, “sufría un bajo nivel de consciencia” y tenía una temperatura de 40°. Tras estabilizarlo, fue trasladado al hospital Clínico, donde quedó ingresado.

El segundo caso se produjo a las 20.40 en la calle Monte Aya, en el distrito de Villa de Vallecas. A esta mujer, el golpe de calor le dio cuando se encontraba en su casa. Se sintió mal y llamó al 112, que la encontró también con un “bajo nivel de consciencia” y una temperatura también de 40°. Los efectivos la llevaron al hospital Infanta Elena, entubada y grave. El tercer caso fue en Alcalá, donde la máxima fue de 38,3° después de una noche en la que la mínima fue de 22,5°, los efectivos asistieron en la plaza de la Juventud a un hombre de 66 años. Estaba consciente, pero presentaba “síntomas neurológicos compatibles con golpe de calor” y 39°, casi 40° de fiebre. Fue conducido al hospital Príncipe de Asturias de la localidad.

El Samur, de momento, no atendido ningún caso grave en lo que va de verano en la capital, según apunta una portavoz de Emergencias Madrid, que añade que el verano pasado fueron 26 casos, de los que tres acabaron en fallecimiento, entre ellos José Antonio González, el barrendero que murió del 14 de julio mientras limpiaba una calle de Vallecas a las cinco de la tarde.

Los síntomas más claros de golpe de calor, “una emergencia vital grave o muy grave por la que se puede morir” según advierte el portavoz del 112, son tener una temperatura muy alta y perder el conocimiento. Además, la piel está caliente, roja y seca, y se siente un dolor de cabeza intenso. También se pueden producir alteraciones del estado mental como delirios, fatiga, hiperventilación, náuseas, vómitos o diarrea. En un vídeo difundido por el 112, la jefa de guardia del Summa, Patricia Blanco, recomienda, para hacer frente a las altas temperaturas, hidratarse a lo largo de todo el día, evitar salir de casa en las horas de más calor y tener la vivienda lo más refrigerada posible en momentos de altas temperaturas.

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