Feijóo gira al discurso duro sobre Cataluña

De la defensa de la “nacionalidad catalana” a la descripción de la situación del castellano en Cataluña como un “apartheid lingüístico”. En apenas unas semanas, Alberto Núñez Feijóo ha girado al discurso duro sobre Cataluña, después de que nada más llegar a la presidencia del PP, su reivindicación de las identidades territoriales le granjeara críticas de los sectores más escorados a la derecha en su partido. El presidente del PP endureció el tono este jueves a consecuencia del incumplimiento por parte del Gobierno catalán de la sentencia que ordena que al menos un 25% de las horas lectivas se imparta en castellano en todos los centros educativos de Cataluña, que considera también “un procés lingüístico”. Sus palabras levantaron una polvareda en la política catalana y el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, le respondió acusándole de “banalizar el dolor, las muertes y la ignominia que comportó el apartheid” al trazar esa comparación con la escuela catalana, lo que consideró “de una bajeza política y moral inadmisible”.

La expresión “apartheid lingüístico” había sido acuñada primero por Pablo Casado y algunos dirigentes del PP de origen catalán se mostraron sorprendidos al escucharla por boca de Feijóo. “Me ha sonado muy duro y contundente para venir de él”, reconocía uno de ellos. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se unió a la indignación de Aragonès por sus palabras e invitó a Feijóo a visitar las escuelas catalanas. “Yo misma estoy dispuesta a acompañarle y comprobará que lo que ha dicho es directamente mentira y una barbaridad”, le afeó.

El líder popular criticó este jueves el “apartheid lingüístico” en una entrevista en Onda Cero en la que también dejó otras reflexiones que abrieron una polémica con sus adversarios políticos. Feijóo sostuvo que los datos del paro están “maquillados”, ya que los contratos fijos discontinuos han sacado del desempleo a entre 500.000 y 750.000 personas “que no están trabajando” porque antes tenían contratos temporales. El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, se mostró después “perplejo” con esas palabras. “Los fijos discontinuos computan como afiliados en alta mientras están activos y dejan de computarse durante su inactividad. Deslegitimar las estadísticas de España es una forma terrible de hacer política”, le criticó.

Feijóo también llegó a afirmar este jueves que el PSOE estaría dispuesto a gobernar con la extrema derecha: “Por supuesto que Vox se presenta contra el PP... No sé si Vox va a gobernar con el PSOE, pero el PSOE estaría dispuesto a gobernar con Vox, no tenga usted ninguna duda. Eso de que no podría dormir gobernando con Podemos es una frase histórica... Tenga cuidado porque en algún momento podría ocurrir. Probablemente, Vox no querría gobernar con los socialistas. ¿El PSOE haría ascos a gobernar con Vox? Tengo mis serias dudas”. El líder del PP ha admitido que el Poder Judicial (CGPJ) tendría que haberse renovado, pero subrayó en la entrevista que el Gobierno se ha dedicado a “vaciar” el órgano de gobierno de los jueces al “prohibirle con una ley que pueda cubrir las vacantes del Tribunal Supremo”. Y añadió: “El Gobierno ha hurtado las competencias del CGPJ para poder cubrir esas vacantes y, en mi opinión, esa ley es inconstitucional”.

‘Apartheid’ y bilingüismo cordial

El jefe de los conservadores es un político que ha hecho gala del “bilingüismo cordial” y de su defensa del gallego, una lengua en la que ha hablado con regularidad como presidente de la Xunta de Galicia. Fuentes de su equipo subrayan que “la metáfora del apartheid está bien traída por la gravedad de lo que está ocurriendo en Cataluña con una norma que arrincona el castellano” y que “es compatible con defender el bilingüismo cordial y el respeto a las particularidades de Cataluña”. Tras el requerimiento de la justicia para que se enseñe el 25% de clases en castellano en Cataluña, el Gobierno catalán ha aprobado un decreto que establece la “inaplicación” de “parámetros numéricos” en el uso de lenguas en las escuelas. El apartheid fue el sistema de segregación racial instaurado formalmente en Sudáfrica en 1948, mediante leyes que despojaron de múltiples derechos a la población negra mayoritaria.

Algunas fuentes del PP catalán interpretan el giro discursivo de Feijóo como respuesta a que Ciudadanos y Vox se hubieran adelantado al PP en la batalla política contra la decisión del Govern. El presidente del PP anunció el martes que su partido tenía intención de sumarse al recurso de Ciudadanos al Tribunal Constitucional contra el decreto catalán, aunque en realidad es Cs quien tiene que adherirse al del PP porque se necesitan 50 diputados o senadores que el partido de Inés Arrimadas no tiene. Sin embargo, Cs se anticipó en el anuncio. “No podíamos desaprovechar esta coyuntura, Cs y Vox nos pasaban por delante. Feijóo ha frenado de raíz cualquier especulación sobre que no estábamos siendo suficientemente contundentes”, opina un dirigente popular.

Feijóo ha endurecido el tono después de la polémica que provocó en el PP hace solo unas semanas su defensa de la “nacionalidad catalana” en Barcelona y de que el coordinador general, Elías Bendodo, hablara de la “plurinacionalidad de España”, una expresión que después rectificó. Sectores del PP llegaron a reclamar entonces que el nuevo líder convocara una convención ideológica para discutir este posicionamiento político. “El apaciguamiento con los nacionalistas no nos trae votos”, cuestionó Esperanza Aguirre en conversación con EL PAÍS.