El Gobierno cancela la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros e impide las preguntas de la prensa

Vuelve el plasma a La Moncloa. El Gobierno, en una decisión con muy pocos antecedentes, ha cancelado la habitual rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, una tradición ininterrumpida de 40 años. El Ejecutivo ha programado un acto para presentar el gran acuerdo por el empleo entre patronal, sindicatos y el ministerio de Trabajo con discursos del presidente y los líderes de los empresarios y las centrales, pero no solo no han podido hacer preguntar los periodistas, es que ni siquiera les han permitido acceder al recinto de La Moncloa para asistir al acto en los jardines. Solo han podido acudir redactores gráficos.

Este es un formato cada vez más habitual en el Gobierno de Pedro Sánchez, sobre todo para los actos con sindicatos y patronal y también con algunas visitas internacionales, a las que solo se les da cobertura gráfica, algo que no sucedía en el pasado. Por Madrid han pasado varios presidentes de países importantes sin ofrecer la tradicional rueda de prensa conjunta.

Pero lo que no había sucedido hasta ahora es que se cancelara la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que habitualmente ofrecer la portavoz, María Jesús Montero. Precisamente este viernes ha habido un Consejo de Ministros extraordinario con medidas importantes, como la aprobación del plan Renove o un nuevo paquete de avales públicos de 40.000 millones de euros y otros 10.000 para rescatar empresas en problemas. La Moncloa ha anunciado que informará sobre estos acuerdos a través de un comunicado, algo sin precedentes en una reunión de este tipo. Sánchez ha apuntado algunas de estas medidas en su discurso, sin posibilidad de preguntar por detalles.

El Gobierno comparecía hasta ahora sin problemas tras los consejos extraordinarios de los viernes, que se han convertido en frecuentes durante la crisis del coronavirus. Para buscar un antecedente de la reunión de todos los ministros sin rueda posterior hay que ir a un consejo extraordinario con Mariano Rajoy, que aprobó una reforma exprés para la ley orgánica que reguló la abdicación de Juan Carlos I.

Durante el confinamiento, Sánchez y el Gobierno han multiplicado las ruedas de prensa y han respondido a muchas más preguntas de lo que era habitual, incluso más que en otros países europeos, pero llegada la llamada nueva normalidad, La Moncloa ha dado un giro de 180 grados y este viernes no ha permitido que los redactores se acerquen a un acto tan trascendente como la firma de un gran acuerdo por el empleo con toda la pompa en los jardines del palacio. Han forzado así a los redactores a seguirlo por televisión, algo que fue muy criticado por el PSOE en la época de Mariano Rajoy.