_
_
_
_
Comer
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Tapas de alta cocina en Barcelona

En Gresca Bar, la segunda marca del chef Rafa Peña, se sirven mariscos a la brasa, casquería y buenos postres

Restaurante Gresca Bar, en Barcelona.
Restaurante Gresca Bar, en Barcelona.
José Carlos Capel
Puntuación: 7
Pan7
Bodega7,5
Café7
Ambiente6
Aseos7
Servicio6
Cocina7,5
Postres7

Gresca Bar no es un bar de tapas como tantos otros. Equivale a la segunda marca del cocinero Rafa Peña, que en complicidad con su esposa, Mireia Navarro, y desde octubre de 2016, gestiona también este espacio comunicado con su primitivo restaurante a través de una cocina abierta dotada de minibarra y seis taburetes. En realidad, se trata de un pasillo ruidoso con mesitas incómodas en las que se disfruta de especialidades escandalosamente buenas. A veces tapas, en ocasiones bocaditos o medias raciones, frituras, salazones, mariscos a la brasa y postres que superan, incluso, a las propuestas saladas. Recetas rescatadas de la cocina tradicional, popular, clásica o moderna, que Peña reinterpreta con un instinto que emociona.

Alta cocina informal en el sentido más riguroso de la frase, que numerosos clientes acuden a disfrutar en todos los turnos. “Nunca me hubiera imaginado que íbamos a tener semejante éxito”, asegura el patrón, quien, con la ayuda de una brigada joven, termina a la vista especialidades destinadas a ambos negocios. En el bar, recetas bien presentadas sin adornos que desdibujen los productos. Ingredientes caros o baratos que se cocinan con idéntico desparpajo. Desde ostras a la brasa, berberechos con vinagreta de verduras y chuletas de vaca vieja, hasta recetas de casquería como las mollejas de ternera con puré o el sabroso hojaldre relleno de tuétano y oreja de cerdo.

Hojaldre de terrina de oreja y foie, plato del Gresca Bar.
Hojaldre de terrina de oreja y foie, plato del Gresca Bar.

Algunas de sus propuestas parecen inspiradas en escenarios lejanos. Si las carnosas gildas de bacalao miran a la parte vieja donostiarra, los boquerones en vinagre de doble filete, monumentales, husmean en las tascas madrileñas, y las berenjenas lacadas, deliciosas, en las tabernas japonesas. Hace falta mucha personalidad para ofrecer un seso de ternera entero con mantequilla y limón como plato de peso, símbolo de la gran casquería olvidada. Por supuesto, el celebrado biquini de panceta de ibérico y queso comté alcanza el sobresaliente. Entre tantos aciertos queda un poco desairada su anodina ensalada de colmenillas y brócoli. Lo mismo que la de remolacha con frutos secos, sobrada de aceite. La codorniz en salsa agridulce precede a los postres. Delicadísimo el pastel de chocolate con helado de vainilla; enorme su torrija, y menos golosa la pavlova con cítricos. La bodega, bien gestionada, con vinos rastreados con criterio, es otro de sus puntos fuertes. Gresca Bar juega en territorios ajenos a sofisticaciones, en los que comida y bebida conforman un todo que entusiasma.

Gresca Bar

  • Dirección: Provença, 230 (Barcelona)
  • Teléfono: 934 51 61 93
  • Cierra: nunca
  • Precio: entre 30 y 50 euros por persona. Gilda de bacalao, piparra y pimiento, 4,50 euros. Bikini de lomo ibérico y comté, 10. Colmenillas con butifarra de perol, 12. Pastel de chocolate con helado de vainilla, 7.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

José Carlos Capel
Economista. Crítico de EL PAÍS desde hace 34 años. Miembro de la Real Academia de Gastronomía y de varias cofradías gastronómicas españolas y europeas, incluida la de Gastrónomos Pobres. Fundador en 2003 del congreso de alta cocina Madrid Fusión. Tiene publicados 45 libros de literatura gastronómica. Cocina por afición, sobre todo los desayunos.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_