Es la cara visible de los edificios. Su portada. Esconde la vida que bulle en su interior y que se asoma por ventanas indiscretas. Un juego de colores, líneas y formas.
Un bloque de viviendas en Kusadasi, en la costa egea de Turquía.Yener TorunFachada de un hotel en Manavgat, al sur de Turquía.Yener TorunVivienda en el barrio de Sultanbeyli, en Estambul.Yener TorunUn edificio de oficinas en el barrio de Kartal de Estambul.Yener TorunUn silo en el distrito turco de Konak.Yener TorunUn edificio industrial en la ciudad de Gebze, al noroeste de Turquía. Pura fachada Edificios industriales, viviendas públicas y escuelas de Estambul y sus alrededores son la base del proyecto fotográfico del arquitecto Yener Torun. Un universo creativo que comenzó hace seis años para destacar los pequeños detalles de estas construcciones que a veces pasan inadvertidas para sus habitantes. Los colores, líneas y simetrías de sus estructuras se ordenan ante su objetivo convirtiéndose en llamativas composiciones visuales. Los espacios planos priman sobre la profundidad y los elementos arquitectónicos quedan aislados para brillar por sí mismos. La frialdad de las secuencias de ventanas y balcones vacíos se rompe con la presencia casi imperceptible de unos inquilinos que despiertan la curiosidad del observador. La vida más allá de las fachadas, más allá de la arquitectura.Yener Torun
