El misterioso pato mandarín que aparece y desaparece en Central Park
Localizado tras cinco días dar señales de vida un ejemplar de esta especie del este de Asia que se ha convertido en la nueva atracción del parque neoyorquino
Pasear por Central Park en otoño es habitualmente un auténtico espectáculo pero, desde principios del pasado mes de octubre, tiene un valor añadido para locales y turistas: ver y, sobre todo, fotografiar,tuitear o instagramear, al pato mandarín. Se trata de un ave de bellísimo plumaje natural del este de Asia —los machos, porque las hembras son anodinas— que ha aparecido misteriosamente entre la bandada habitual que habita en el parque neoyorquino, pese a ser típico del este de Asia. Lo raro de la historia no es de dónde viene, más bien de dónde se ha escapado o quién lo ha soltado, sino que nadie le haya puesto nombre todavía.
The Central Park Pond's newly-arrived male Mandarin Duck (we still do not know how it got here) unseated the Wood Duck as prettiest duck in the park. Gus Keri brings us close-up video pic.twitter.com/cauqVt4kSK
— Manhattan Bird Alert (@BirdCentralPark) October 11, 2018
Un fotógrafo de aves de Nueva York, Gus Keri, lo grabó el 10 de octubre y su vídeo ha desatado una auténtica mandarínmanía de la que se venden incluso camisetas. El elegantón pato mandarín, inconfundible por su copete rojo con brillos metálicos de color verde sobre la frente y su plumas de un color naranja cobrizo a modo de barbas, sobresale entre los pactos autóctonos, los ánades reales de cuello verde, nadando en las balsas de agua del parque.
Se lo vio por primera vez en el lago The Pond (literalmente La Charca), de 1,4 hectáreas, con forma de coma y situado en la parte más meridional del parque. También visitó días después Turtle Pond, el estanque de las tortugas.
En apenas unos días se corrió la voz de su presencia, lo que se tradujo en grupos numerosos de personas con prismáticos o con cámaras en su busca. Unas voluntarias de Central Park cuentan que solo hay que buscar un grupo de gente junto al agua y allí estará el pato, que lleva una identificación anillada en la pata y que probablemente ha escapado de una vida en cautividad, aunque "nadie lo reclama", ya que en Nueva York es ilegal tenerlo como mascota.
HE'S BACK! The MANDARIN DUCK has returned to the Central Park Pond, off 60th and Fifth, on the east shore #birdcp via @realTedOBrien pic.twitter.com/gQMp1eu8NS
— Manhattan Bird Alert (@BirdCentralPark) November 8, 2018
El animal, que también luce una franja de tono morado iridescente el pecho y rayas blancas y negras alrededor de la cola, se mueve con soltura y ajeno a la expectación ante decenas de observadores, haciendo gala de los títulos de "pato glamuroso" y "soltero más atractivo" que le han otorgado los medios. La historia del pato llegó al The New York Times y a todas las cadenas de televisión del país y hasta la oficina del alcalde de la ciudad le dio la bienvenida en Twitter: "Tenemos un nuevo vecino en Central Park".
Hasta que el lunes 5, como informa el Washington Post, nadie lo vio, tampoco el martes. Ya el miércoles, una cuenta de Twitter, Manhattan Bird Alert, que se dedica al avistamiento de aves en la gran manzana y que ha difundido docenas de imágenes del raro ejemplar en distintos puntos del parque, alertó de su desaparición y a los fans del pato les dio un infarto.
Sin embargo, se ha tratado de una falsa alarma: la misma cuenta ha informado este jueves de que el pato sigue allí. Tampoco estaba allí el martes. Este ejemplar, que "como una cebra entre los caballos" como dice el Post, ha vuelto a The Pond y se especula que los tres días en los que ha estado perdido estuviera en otro de los estanques del parque o nadando en aguas del río Hudson. El parque cuenta con más lagos, desde pequeños estanques como el Conservatory Water y enormes lagos artificiales como el Reservoir.
Según explican expertos al medio local Gothamist, el primero que informó del hallazgo, el pato es una especie procedente del este de Asia y no migra de forma natural a esta zona de EE UU, y tampoco ha escapado del zoo de Central Park, que se encuentra dentro del espacio natural y que era otra de las teorías. Los principales zoológicos de Nueva York han confirmado que tampoco ha huido de sus instalaciones.
David Barrett, que lleva la cuenta Manhattan Bird Alert, explica a Fox News que el pato mandarín se caracteriza por ser "agresivo" y está "reivindicando su dominio", por lo que persigue a otras de las aves del estanque. El responsable del departamento de parques de Nueva York asegura que el pato mandarín parece estar sano e incluso se ha integrado entre el resto de patos.
A juicio de Barrettm, en los próximos meses corre riesgo de morir porque se alimenta de insectos y vegetación situados en la superficie del agua y esta se congela en invierno, aunque suele quedar una parte líquida, por lo que Nueva York podría convertirse en su hogar permanente.
El pato mandarían es oriundo de China, Japón y Siberia, pero fue introducida en diversos parques de Europa. Su población mundial se estima entre 65.000 y 66.000 ejemplares, con una importante población de mil parejas en el Reino Unido. También hay grupos aislados en Estados Unidos, pero en California y Carolina del Norte.
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