Pasiones gastronómicas: cuando el vino encontró a la alta cocina
Somos lo que comemos. Y lo que bebemos. La gastronomía y el vino son aliados naturales. Juntos convierten una comida o una cena en una experiencia memorable. Es la pasión por la gastronomía en su máxima expresión. Viña Pomal siempre ha potenciado esta relación destinando sus mejores cosechas a satisfacer los paladares más exigentes y a seducir a nuevas generaciones de apasionados por el vino y la cocina. Por este motivo, la bodega riojana se ha embarcado en el proyecto 'Sociedad Compromiso'.
Esta iniciativa promueve la búsqueda de la mayor calidad en todos los aspectos posibles de la gastronomía, desde la copa hasta el plato. 'Sociedad Compromiso' cuenta ya con la participación de medio centenar de restaurantes en toda España con los que Viña Pomal fomenta el intercambio de conocimientos y experiencias. A ella se han unido establecimientos que comparten la pasión y la apuesta por la excelencia que esta bodega defiende.
Viña Pomal, una casa centenaria que ha sabido mantener su historia adaptándose a los nuevos tiempos, ha primando siempre la calidad de sus viñedos enclavados en la comarca riojana de Haro. Un compromiso con la tierra, el origen y la tradición. Es la base sobre las que esta bodega centenaria construye sus alianzas gastronómicas y el motivo por el que Mario Sandoval ha sido elegido como embajador estelar de la firma.
El chef de Coque comparte estos valores en su proyecto culinario. Sandoval representa a la tercera generación al frente del restaurante madrileño. Siempre ha defendido la elaboración de platos a base de productos de calidad y de proximidad. El cocinero elabora sus platos con la misma pasión y empeño que dedica Alejandro López, enólogo de Viña Pomal, a cada una de sus añadas. La relación entre ambos creadores se ha convertido en una fuente inagotable de creatividad e inspiración. Un pacto entre dos grandes talentos de la gastronomía. Porque el buen comer no puede concebirse sin el buen beber.
El Viña Pomal Reserva Centenario 2013 ganó este año el premio Gran Bacchus de Oro que le convierte en uno de los siete mejores vinos de España. Este prestigioso premio se decide mediante una cata a ciegas con un jurado de sumilleres, enólogos y masters of wine.
