Una madre difunde la factura del tratamiento de su hijo como protesta contra el fin del Obamacare

Alison Chandra, una madre de Nueva Jersey (EE UU) ha compartido esta semana en redes sociales lo que le supondría la factura hospitalaria de su hijo Ethan, de tres años, que padece una enfermedad degenerativa. Los gastos ascenderían a 231.115 dólares si entrase en vigor la reforma sanitaria que plantea el actual presidente del país, Donald Trump, y que acabaría con la de su antecesor, Barack Obama. Con el actual sistema sanitario, Chandra está pagando unos 500 dólares anuales. Una gran diferencia.

Chandra, que además es enfermera, decidió, tras recibir la cuenta del hospital, calcular uno a uno los gastos que conlleva el tratamiento de su hijo ahora y en un futuro supuesto, si la nueva ley de Trump se aprobara. Y luego, a modo de presión, decidió colgar el resultado en Twitter. "Os ahorro las matemáticas. Sin seguro, deberíamos pagar por 10 horas en el quirófano, una semana en la UCI y otra semana en la unidad de cardiología: 231.115 dólares", explica la madre en su tuit. Su historia se ha compartido más de 73.000 veces.

El pequeño padece el síndrome heterotaxia, se trata de una condición congénita que recibe una serie de anomalías relacionadas con la disposición interna de los órganos del cuerpo, los cuales se ubican en una posición distinta de la habitual; por ejemplo, el hígado estaría al lado izquierdo. La peculiaridad de la patología hace, además, que cada caso sea distinto. Debe tratarse de forma multidisciplinar y los cuidados son de por vida.

"El niño nació con nueve defectos congénitos en el corazón, tiene dos pulmones izquierdos, el bazo tiene una función dudosa, y su hígado y vesícula están situados en la mitad de su cuerpo, en línea con el corazón", explicó la mujer a la CNN. "El tratamiento de Ethan ya ha superado, de sobra, el millón de euros", prosiguió, "y ahora veo amenazado su tratamiento".

¿Qué ocurriría si entrará en vigor la nueva reforma de Trump? Esta es la pregunta que lanzó esta madre para poner sobre la palestra a los que serán afectados por esta nueva medida. La sociedad estadounidense está expectante y asustada de lo que puede significar, una regulación que dejaría sin seguro médico a 14 millones de personas en 2018 y que favorece a los ricos frente a los pobres, reduciendo, además, las ayudas del programa Medicaid para familias de pocos ingresos.

"Pienso que la mayoría de la gente no entiende lo que va a perder si la nueva reforma sale adelante", aseguró la madre en un periódico local. "Y mi miedo es que se vean afectados servicios como la cobertura de los ingresos hospitalarios, los medicamentos, la investigación, los servicios de rehabilitación o de pediatría. Y tengo miedo", añadió Chandra. "Ethan necesita mediación para el resto de su vida. Si vuelve el límite para recetar medicamentos, mi hijo está fuera. Es como decir, no merece la pena que vivas, eres demasiado caro", añadió la mujer.

"Cómo no nos va a afectar. No creo que haya ni un solo habitante en este Estado que no se haya beneficiado de estas ventajas o que no tenga un pariente que lo haya hecho", explicó la mujer. Tras colgar los mensajes en Twitter, esta mujer se fue a dormir. " Y cuando me desperté, vi que todo el país estaba hablando de mi hijo", concluyó Chandra. Según relató la mujer, si se llegase a hacer efectiva la nueva reforma de Trump, tendría que vender su casa e irse a vivir a Canadá.

Eso sí, tras los tuits, hubo comentarios buenos que contaban historias similares, pero otros negativos que criticaban su comportamiento. Sin duda, un país muy dividido con la salud en su epicentro.