Endesa se impone en el macrocontrato de 1.741 millones para el suministro de electricidad a Adif
Renfe, Ouigo y Iryo podrán negociar un precio fijo, aunque referenciado al coste futuro de la luz
El mayor consumidor de electricidad de España, Adif, ha anunciado este miércoles la adjudicación a Endesa de la mayor parte de un macrocontrato de suministro de electricidad de origen renovable valorado en 1.741 millones de euros. El gestor ferroviario ha asignado a la filial de la italiana Enel 18 de los 19 lotes, con un valor conjunto de 1.710 millones (el 98% del total), frente a un único lote ganado por Iberdrola, valorado en poco más de 31 millones. La energía contratada se utilizará en la tracción de los trenes —tanto de viajeros como de carga—, en las estaciones, en las terminales de mercancías y en otras instalaciones ferroviarias.
Los importes mencionados solo incluyen el coste de la energía —no así los costes de acceso a las redes de transporte y distribución— y, en todo caso, fluctuarán en función de los consumos reales, el precio de la electricidad en el mercado mayorista y las posibles coberturas con derivados para así eliminar la volatilidad. Las ofertas finales por cada uno de los lotes están, por tanto, referenciadas al precio del mercado mayorista, que varía cada hora, con la posibilidad de que los operadores finales (Renfe, Ouigo, Iryo...) puedan cubrirse para obtener un precio fijo por meses, trimestres o años, aunque siempre referenciado al mercado de futuros.
“El nuevo modelo de gestión responde a un intenso trabajo realizado por Adif Alta Velocidad (Adif AV) con las operadoras ferroviarias con el fin de dotarles de mayor capacidad de decisión y gestión en uno de sus principales costes y, así, reforzar la sostenibilidad del sector y el proceso de liberalización”, expone la compañía pública en la nota publicada este miércoles. Hasta ahora, las coberturas solo se podían llevar a cabo por lotes, lo que “obligaba a Adif AV a coordinar la orden de cierre con todos los operadores que actuaban en la infraestructura (alta velocidad, convencional de ancho ibérico y de ancho métrico)”.
La propia Adif, enfatiza, “también dispondrá de mayor flexibilidad en la gestión del contrato de suministro para usos distintos de tracción” al poder llevar a cabo coberturas de precios por un porcentaje del consumo de cada lote en el mercado de futuros, con el objetivo de eliminar la volatilidad del mercado diario y asegurarse un precio estable “cuando la situación del mercado así lo aconseje”.
Hasta finales de 2025
Los contratos sellados entre Adif y ambas eléctricas entrarán en vigor el mes que viene y estarán activos hasta diciembre de 2025, “incluyendo una posible prórroga por un periodo máximo de dos años en el primer caso y, de un año, en el de energía para usos distintos de tracción”, según explica la empresa pública. El consumo estimado durante la vigencia de los contratos se estima en 7.547 gigavatios hora (GWh) para la tracción de trenes, y en 720 GWh para estaciones y otras instalaciones.
El año pasado, un ejercicio en el que el tráfico creció con fuerza por el desembarco de los operadores de bajo coste, los trenes que circularon por las vías españolas consumieron un total de 2.409 GWh, casi el 1% del total. A esa cifra hay que sumar otros 286 GWh en estaciones y otras instalaciones de Adif.
La factura de Renfe
Adif es el mayor contratante de energía de España como gestor de las vías ferroviarias y su electrificación, pero quienes pagan la factura son las compañías de transportes que las usan como Renfe, Ouigo e Iryo. El incremento de los costes energéticos ha pesado sobre las cuentas de Renfe cuya factura eléctrica —también la mayor del país— solo para la tracción de sus trenes AVE aumentó un 158% el año pasado respecto a 2019 (de 90 a 232 millones de euros). En 2022, el gasto total en energía de tracción en todas las divisiones de Renfe ascendió a 630 millones de euros, un 78,6% más que un año antes y más del doble (+126%) que en 2019.
Debido precisamente al impacto del alza del precio de la luz, Renfe registró unas pérdidas de netas de 108,6 millones de euros, incumpliendo su previsión de vuelta a la rentabilidad. La compañía quiere atajar esta sangría mediante dos medidas: el nuevo sistema de contratación flexible que le permite Adif en este contrato de energía verde y el autoconsumo fotovoltaico.
Para ello, la compañía negocia con los ministerios de Transportes y Transición Ecológica el permiso para instalar paneles fotovoltaicos que ya está llevando a cabo en algunas de sus instalaciones con la normativa de autoconsumo. Para 2022, ha anunciado una inversión de 12 millones de euros en un plan para instalar placas fotovoltaicas de autoconsumo que se llevará a cabo en las 14 bases de mantenimiento de la empresa, que en su conjunto tienen un promedio de consumo anual que alcanza los 40.000 MWh/año.,
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