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Las patronales bancarias impugnarán el impuesto extraordinario al sector

La AEB y la CECA ultiman el recurso a la orden ministerial que presentarán ante la Audiencia Nacional

La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, habla con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su llegada al Congreso, el pasado miércoles.
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, habla con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su llegada al Congreso, el pasado miércoles.Gabriel Luengas (Europa Press)
Hugo Gutiérrez

Las patronales bancarias, la Asociación Española de Banca (AEB) y la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), impugnarán finalmente el impuesto extraordinario al sector aprobado por el Gobierno, según fuentes conocedoras de los preparativos legales. Será, en principio, esta semana y se trata de un paso que entienden que es casi obligado para ambos organismos. En concreto, lo que se va a recurrir técnicamente es la orden ministerial en la que se detalla el pago de la tasa ante la Audiencia Nacional, ya que las liquidaciones solo la pueden impugnar las entidades a título particular. Ambos organismos, a preguntas de EL PAÍS, han preferido no hacer comentarios al respecto.

De esta forma, tanto la AEB como la CECA toman cartas en el asunto. Como era de esperar. “No recurren todas las liquidaciones porque eso solo lo pueden hacer las entidades que lo pagan, cuando realicen el primer anticipo”, explica una de las fuentes conocedoras del proceso. La idea es anunciarlo en los próximos días, aunque todavía no está todo cerrado. El despacho Garrigues es el que está asesorando a las patronales para preparar el recurso, en el que se estudia si se pueden incluir medidas de suspensión del gravamen de forma cautelar. “Podrían intentarlo, así como pedir cuestiones de inconstitucionalidad. Es cuestionable su legitimación activa, pero defendible que lo hagan”, explica un experto legal.

El texto se basará en los puntos que sostienen que la tasa es inconstitucional, así como la diferencia que entienden que se ha creado en España respecto al sistema tributario europeo. La AEB y la CECA sostienen que existen elementos que vulneran el derecho comunitario. En particular, harán especial énfasis en lo que hace referencia a la distorsión de la competencia, algo que se podría entender incluso como ayudas de Estado en el caso contrario, a los bancos que no están obligados a pagar el gravamen por no superar el umbral de 800 millones en margen de intereses y comisiones netas en España en 2019.

Sobre este punto, de hecho, el documento utilizará el dictamen del BCE, en el que se ponía en duda el efecto que pudiera tener sobre la competencia, así como que se invitaba a trasladar este coste al precio final a los consumidores. Otra de las bazas que se utilizarán serán los estudios previos realizados por expertos independientes.

El gravamen del Gobierno pretende recaudar 3.000 millones en dos años. Consiste en aplicar un tipo del 4,8% sobre el margen de intereses y comisiones netas de los bancos por su negocio en España. El Ejecutivo de coalición lo justifica en la necesidad de obtener una contribución extra del sector financiero, al considerar que este sector se beneficiará de unas subidas de tipos que, de no ser por las tensiones inflacionistas, se hubieran producido de forma más gradual. El primer anticipo del pago, que grava las cifras de 2022, lo deben abonar antes del 20 de febrero por la mitad del importe que le corresponda pagar en el ejercicio. Será en ese momento cuando los bancos, a título particular, podrán recurrir el impuesto igualmente, en concreto la liquidación que les haya llegado.

Las patronales son conscientes de que el momento no es el idóneo, en términos de imagen, tras la presentación de beneficios históricos en el pasado año. “Puede tener una mala lectura, pero no les queda otra”, explica otra fuente conocedora de los trabajos internos. A lo que añade: “Si lo dice el BCE y la EBA, les deja en una posición que tienen que presentarlo sí o sí para defender a sus asociados”.

José Manuel Campa, presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), según explica en una entrevista a EL PAÍS, considera que el impuesto no tendrá un impacto considerable ni sobre la solvencia de los bancos ni sobre el crédito. Unas palabras de las que se puede deducir que en Europa, aunque no se comparta el tributo, prefieren que se pague y no aumente el ruido alrededor de este asunto.

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Sobre la firma

Hugo Gutiérrez
Es periodista de la sección de Economía, especializado en banca. Antes escribió sobre turismo, distribución y gran consumo. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS tras pasar por el diario gaditano Europa Sur. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Sevilla, Máster de periodismo de EL PAÍS y Especialista en información económica de la UIMP.

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