Las farmacéuticas remontan el bache de la pandemia y estiman un aumento de las ventas del 8,8% en 2022

La Asociación Empresarial de la Industria Farmacéutica (Farmaindustria) prevé que el sector aumente este año su facturación un 8,8%, recuperándose del bache que sufrió en los últimos dos años. Según un informe presentado este martes por la entidad, la pandemia y la crisis global de suministros supusieron una ralentización en la cifra de negocio del sector durante los últimos dos años. Sin embargo, la industria augura que este año vivirá una expansión superior incluso a la de 2019, cuando creció un 7,6%.

La facturación del sector en los últimos tres años no ha llegado a retroceder nunca. Pero en 2020, cuando estalló la crisis de la covid-19, el crecimiento de la cifra de negocio sí fue menor, del 2,3%. Eso significa cinco puntos menos respecto a 2019. Las ventas de las farmacéuticas se han ido recuperando progresivamente hasta incrementarse a un ritmo mayor que el de antes de la pandemia.

El medicamento es el cuarto producto más exportado de España. Son los países de la de la Unión Europea los que acaparan más de la mitad de las exportaciones: adquieren un 60,4% del producto que vende fuera. Pese a que las previsiones del informe para lo que queda de año son optimistas, los representantes de las farmacéuticas han afirmado que la inflación les ha pasado factura: los márgenes se han reducido y sus costes de producción han aumentado un 10% respecto al año.

La productividad de las fábricas de medicamentos nacionales ha aumentado en un 3,4% entre los años 2019 y 2022. Un crecimiento que va acompañado del anuncio de la inversión de alrededor de 1.000 millones para renovar los activos industriales del sector, fomentar la sostenibilidad y promover la investigación.

En España operan actualmente 173 plantas de producción de medicamentos que en 2022 han dado empleo a cerca de 36.000 personas. De estas, 106 (el 61%) pertenecen a grupos empresariales españoles y concentran al 56% de los trabajadores. El mayor número de fábricas se encuentra en Cataluña, que alcanza las 79, seguida de Madrid con 40 y Castilla y León con 14. En promedio, las factorías españolas son de menor dimensión que las de capital extranjero, aunque se encuentran en periodo de expansión. Aumenta el número de plantas de más de 250 empleados, que ha pasado de 31 en 2017, a 38 en la actualidad. En las cifras globales, las plantas de entre 250 y 500 empleados son las que más puestos de trabajo ofertan, llegando a emplear a 12.633 personas.

El principal reto para el sector, según Javier Urzay, subdirector general de Farmaindustria, es diseñar un plan estratégico que responda a las necesidades planteadas dentro del PERTE sanitario que está preparando el Gobierno y que contemple, entre otras cosas, mejorar las inversiones en I+D+i o facilitar el acceso a medicamentos nuevos. Urzay también ha hablado de la necesidad de ampliar la fabricación de medicamentos esenciales (libres de patente) y de hacerlo a precios asequibles. “Los costes que tenemos en España son competitivos, pero no son los de China ni los de la India”, ha afirmado.

Otro de los objetivos para la industria clave es reducir la dependencia del exterior en el abastecimiento de materias primas para hacer frente al incremento de costes y a la crisis de suministro. También se ha fijado como objetivo potenciar la fabricación de medicamentos en España para responder a posibles crisis sanitarias futuras. Emili Esteve, director del Departamento Técnico, ha destacado la capacidad de respuesta del sector y su “robusto” sistema de distribución, que permitió responder a las necesidades de la pandemia. “No es lo mismo trabajar si no tienes nada, que tener la infraestructura y ponerla a trabajar 24 horas. Tenemos la estructura, pero debemos reforzarla porque se ha visto que salva vidas”, ha asegurado.