El secretario general de la OCDE, sobre si Madrid es un paraíso fiscal: “Debe evitarse una carrera hacia el cero a toda costa”

“Si tienes varias regiones y autonomías y cada una está compitiendo para ver quién es el que atrae al mayor número de clientela, entonces lo que va a pasar es una carrera hacia abajo, hacia el cero, y eso hay que evitarlo a toda costa”, ha dicho este jueves el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Ángel Gurría, al ser preguntado si Madrid es un paraíso fiscal interno. De esta forma el organismo con sede en París da un espaldarazo a la armonización fiscal en España, una medida defendida por el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos y en estudio por parte del comité de expertos para la reforma fiscal.

En la presentación del Estudio económico de España de la OCDE, Gurría ha señalado que hay que tener “unos criterios homogéneos”. El organismo que representa publicó recientemente informe en el que aconsejaba rediseñar y subir el impuesto de sucesiones y donaciones en los países del bloque “para aumentar ingresos, reducir desigualdades y mejorar la eficiencia”. En ello recogía un estudio elaborado por los economistas Agrawal, Foremny y Martínez-Toledano, que definía a Madrid como un “paraíso fiscal interno” en referencia al impuesto sobre el patrimonio. La OCDE no hacía suya esta postura, y este jueves Gurría ha evitado nombrar a Madrid en su respuesta. Pero ha dejado claro que el think tank está a favor de que haya cierta homogeneidad fiscal dentro del mismo país.

“Todas las regiones de un país y todos los países de una unidad económica, como es el caso de Europa, no es que deban tener impuestos nominales idénticos, ni mucho menos”, ha aclarado. “Pero lo que es muy importante es que no tengamos dentro de un mismo país competencias hacia la baja”.

En España, tanto el impuesto sobre el patrimonio como el tributo que grava las herencias y las donaciones están cedidos a las comunidades autónomas, que tienen competencia normativa para modificar tipos y aplicar reducciones y bonificaciones en el ejercicio de su autonomía fiscal. Esta situación, de facto, ha creado una enorme disparidad entre autonomías. La región de la capital es la única que bonifica al 100% el impuesto sobre el patrimonio, y contempla entre las rebajas más generosas para los familiares directos en herencias y donaciones.

De ahí que varios Gobiernos regionales acusen a Madrid de dumping fiscal. Consideran que hace uso del efecto capitalidad para bajar impuestos a los contribuyentes más acaudalados y así atraer a las rentas más altas. El Gobierno capitalino se defiende alegando que la autonomía fiscal le permite, en los impuestos que todas las autonomías tienen cedidos, aplicar la política fiscal que considere. Otras comunidades, en cambio, se han subido al carro de las rebajas y también han reducido el impuesto sobre sucesiones y donaciones.

En su respuesta, Gurría también ha hecho una velada referencia a los traslados ficticios de domicilio de los más ricos para rebajar su factura fiscal. Estos episodios en España son marginales ―aunque las cantidades en juego no siempre son desdeñables―, pero en su gran mayoría tienen a Madrid como destino. “La competencia a la baja no solo es una competencia hacia un cero, sino a que haya unas ubicaciones y unas asignaciones casi arbitrarias de donde va la gente y donde se registra, sin que necesariamente esté viviendo ahí. Causa muchas distorsiones”, ha añadido el secretario general del organismo.

Gurría también ha recordado que ahora no es el momento de subir impuestos, pese al roto que la crisis sanitaria y económica desatada por la pandemia ha hecho en las cuentas públicas. “Estamos diciendo que sea cuando se consolide la recuperación, pero tampoco es el momento de atraer de manera artificial” a los contribuyentes, ha concluido.