Pedro Sánchez pone el foco del plan de internacionalización en el apoyo a las pymes

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles que el Plan de Acción para la Internacionalización de la Economía Española 2021-2022 destinará la mayor parte de los más de 4.500 millones de euros de los que está dotado a las pymes. Asimismo, Sánchez ha resaltado la colaboración público-privada como una de las claves para impulsar el sector exterior en la recuperación de la economía española en la era post-Covid y consolidarla “en la cabeza del desarrollo”.

En un acto lleno de gestos (escogió la sede del ICEX para presentarlo; invitó a la consejera de Economía y Empresa del Gobierno vasco, Arantxa Tapia; dio la palabra también a los presidentes de la CEOE, Antonio Garamendi, y las Cámaras, José Luis Bonet, y contó con la asistencia de un importante ramillete de grandes empresarios con los que al final departió unos minutos), Sánchez destacó que este plan, que el Consejo de Ministros aprobó el pasado 11 de mayo, se alinea con el Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia, del que el Gobierno espera recibir la aprobación de Bruselas en la segunda quincena de junio para poder anunciar a principios de julio los primeros 9.000 millones de adelanto de los fondos europeos.

Ambos planes, según expresó el presidente, “se refuerzan y complementan, por eso es importante darle voz”. Implican, a su juicio, la apuesta por la transformación, la digitalización, el desarrollo verde y la formación profesional. En ese sentido, recordó las demandas y oportunidades que se han generado tras la pandemia y que se concretan en configurar el sector exterior como pilar clave acelerando la transformación de sectores estratégicos como el turismo, el automóvil, el audiovisual y la salud; así como aumentar la resilencia acompañando a las empresas en el camino de la digitalización.

Además del apoyo específico para la internacionalización adaptado a las necesidades y perfil de las pymes, el plan se orienta a través de otros cinco ejes: incorporar la innovación, la tecnología, la marca y la digitalización; desarrollar el talento para la internacionalización; potenciar la captación y consolidación de la inversión extranjera; reforzar la coordinación y complementariedad de las acciones de los actores relevantes y aprovechar mejora las oportunidades de negocio derivadas de la apertura de los mercados.

Ampliar la base exportadora

“Nadie duda de la robustez del sector exterior español; más allá de la interrupción por la pandemia, la mejora de la competitividad es una de las transformaciones estructurales más positivas que ha experimentado la economía española, lo que ha permitido aumentar la cuota exportadora y permitido cambiar el signo de la balanza comercial”, manifestó el presidente tras destacar que en la última década el número de empresas con actividad exterior ha pasado de 39.000 a 55.000.

Luego añadió que, sin embargo, “no ocultan la necesidad de afrontar cuanto antes los retos de ensanchar la base exportadora de las pymes, aumentar su dimensión; incorporar bienes de mayor valor añadido y contenido tecnológico y ganar en diversificación geográfica más allá de la UE”. En este sentido, Sánchez recomendó poner el foco en Asia y Estados Unidos, así como potenciar la relación con Latinoamérica, con el objetivo de alcanzar un acuerdo entre la UE y Mercosur. En ese contexto se enmarca la visita que realizará con una delegación empresarial a Argentina y Costa Rica en próximas fechas.

Sánchez cuenta con el compromiso y colaboración de las empresas. “Es un proceso que va mucho más allá del beneficio económico de las empresas, es la expresión más clara de la España que queremos y debemos ser, un país abierto que tiene un proyecto común que debe desarrollarse en todos los campos”, dijo el presidente. “Las actitudes proteccionistas”, continuó, “se traducen en atraso, desigualdad y bloqueo. Ni el mundo en que vivimos ni al que nos encaminamos puede entenderse desde una perspectiva distinta del multilateralismo, la cooperación internacional y la colaboración pública-privada y el desarrollo sostenible. En ese camino sé que las empresas españolas están preparadas y dispuestas. Nuestra tarea es facilitar la tarea con el objetivo de continuar a la cabeza en el que progreso sea sinónimo de justicia y libertad”, concluyó.