El coste por hora trabajada se dispara un 8,3% durante la pandemia, una cifra récord

La reducción de la jornada laboral durante la pandemia elevó a récord el coste por hora trabajada en España. Creció un 8,3% entre abril y julio —ya eliminados los efectos estacionales y de calendario—, el mayor incremento de la serie histórica, según ha publicado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los sectores más afectados son las actividades artísticas y el entretenimiento, el negocio inmobiliario y la industria extractiva. El principal motivo de este fenómeno es la caída sin precedentes de las horas trabajadas durante esos meses en casi un 25%.

El incremento del coste por horas se divide en dos variables: el coste salarial y el resto. El primero, que recoge únicamente lo que el empleador paga al empleado, creció un 6,2% en el segundo trimestre del año. Lo cual no implica que los salarios hayan incrementado -de hecho, en el primer trimestre del año (últimos datos disponibles) solo crecieron un 0,8%, pese a la tendencia del 2% con la que cerró 2019-. “La razón es sencilla. El denominador, las horas trabajadas, ha caído mucho más que lo que cuesta el empleado a la empresa”, comenta Javier Serrano, analista de la consultora AFI.

El resto de costes incluyen las cotizaciones y las indemnizaciones por despido, que crecieron un 14,4%. Afectó especialmente a las empresas de más de 50 empleados, para las que el ERTE solo cubría el 75% de las cotizaciones a la Seguridad Social, frente al 100% en el resto. También a aquellas que se deshicieron de parte de su plantilla por el hundimiento de la economía.

Carlos Martín, director económico de Comisiones Obreras, cree que es algo temporal que no debería afectar a largo plazo. “Es algo extraordinario, que debería regularizarse según se reincorporen los trabajadores. De hecho, el grueso de los 3,2 millones de trabajadores en ERTE ya ha vuelto”, valora. Sin embargo, remarca, las actividades más afectadas (como el turismo o la hostelería) deberán seguir recibiendo ayudas porque tardarán más en recuperarse.

Según los datos recopilados por el INE, el sector de las actividades artísticas, recreativas y de entretenimiento fue el de mayor crecimiento en el coste laboral por hora trabajada, con un 30,2%. En parte por el efecto del sector público, con funcionarios que trabajan en bibliotecas y museos, entre otros, y que paralizaron completamente su labor durante la cuarentena. También por la reacción tardía del Gobierno en la elaboración de un plan económico para proteger la cultura.

A este sector le siguió el negocio inmobiliario, con un aumento de los costes por hora del empleado del 21% y el de las industrias extractivas del 17,8%. El informe también muestra el efecto positivo de los ERTE en la hostelería, un sector muy castigado por la limitación de los aforos de bares, restaurantes y hoteles. En este caso, el coste salarial solo creció un 0,4%.

Serrano, de AFI, asegura que la consecuencia directa para las empresas entre los meses de abril y julio fue una caída de la productividad. “Si trabajas menos horas, cae la producción de la empresa, caen las ventas y caen los beneficios. Y si en esta situación los costes se mantienen, te encuentras con un grave problema en la viabilidad del negocio” cierra.