El banco malo perdió casi 600 millones el año pasado
Los números rojos se han reducido un 15% entre 2016 y 2017
La Sareb, conocido como el banco malo, perdió 565 millones en 2017. Esto supone que la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (nombre completo de la Sareb) redujo sus números rojos en un 15%, según ha presentado en sus resultados este viernes. Estas pérdidas se debieron, principalmente, a los costes financieros de la firma procedentes de su alto endeudamiento que ascendieron a 541 millones de euros en 2017. Sin tener en cuenta esta partida, el resultado de la sociedad habría sido positivo, de siete millones.
El año pasado la empresa alcanzó un récord de venta de activos, con 18.925 inmuebles vendidos, lo que supone un aumento del 34% respecto al periodo anterior. Dos tercios de las operaciones se concentraron en cuatro comunidades autónomas: Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid. Con esto, los ingresos de la Sareb se situaron en 3.833 millones, un 2% menos que los del año anterior, un descenso ligado a una cartera que cada vez está más reducida por el efecto del proceso de desinversión. La Sareb, propiedad del Estado al 45% y de la banca al 55%, se constituyó para evitar la quiebra de las antiguas cajas de ahorros retirándoles sus activos de peor calidad. El plan consistía en depositarlos en el banco malo a la espera de que mejorase el mercado y fuera posible venderlos a mejor precio.
La gestión de los activos financieros, que son fundamentalmente préstamos de promotores inmobiliarios, generó 2.622 millones de euros, el 69% de los ingresos totales, mientras que el resto procedió de venta de inmuebles y la cartera en alquiler.
En cuanto al margen bruto del banco malo, este creció un 16% el pasado año, hasta los 767 millones de euros, debido a mejoras en los márgenes de gestión de la cartera de activos financieros (+11%) y de activos inmobiliarios (un 35% más). Los gastos operativos de la sociedad, vinculados a la gestión y la comercialización de los activos y a costes de mantenimiento, tributos y comunidades de vecinos, entre otros, fueron de 683 millones de euros.
En 2017 se proyectaron 5.209 viviendas nuevas, de las que 1.458 se terminaron y 3.751 se han iniciado o están en la fase previa a su construcción. La plataforma de préstamos de Sareb realizó transacciones por 35 millones de euros y, de cara a 2018, están previstos otros seis procesos de venta de préstamos por 3.000 millones de euros de valor nominal.
En sus cinco años de vida, la Sareb ha liquidado el 27% de su cartera, el equivalente a 13.602 millones de euros, y los préstamos a promotor han pasado de representar el 80% de la cartera al 68% actual. El número de deudores se ha reducido en 3.000 en este quinquenio y durante este periodo la gestión y desinversión de préstamos e inmuebles ha generado ingresos por 20.700 millones de euros.
Liquidado el 25% de la deuda
La sociedad ha pagado el 25,4% de la deuda emitida tras su constitución con el objetivo de abonar la cartera adquirida a nueve entidades que recibieron ayudas públicas, que alcanzó la cifra de 50.781 millones de euros. Concretamente, se ha reducido en 12.906 millones de euros, de los que 3.050 millones de euros se amortizaron en 2017.
El presidente de Sareb, Jaime Echegoyen, ha rechazado que la crisis institucional de Cataluña haya tenido un impacto "brutal" sobre la sociedad, cuya exposición en la región asciende al 17% o 18%, principalmente vivienda. Según ha explicado, Cataluña afecta a Sareb "como le afecta a todo el mundo" y en el negocio retail el impacto es menor que si se dispone de inmuebles industriales u hoteleros. "Todos los días hemos seguido vendiendo en Cataluña", ha señalado.
Para Echegoyen, el tema de Cataluña preocupa a la sociedad, pero poco. "Nuestra socimi tiene un 25% de pisos en Barcelona y lo hemos colocado con inversores pequeños", ha destacado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.