Tres años de cárcel para dos exjefes de Verbatim por delito fiscal continuado
La Audiencia Nacional considera que la multinacional de CD es responsable de haber escamoteado 3,3 millones a Hacienda
La Audiencia Nacional ha condenado a tres años de cárcel cada uno a dos exdirectivos en España de la multinacional de CD Verbatim por un “delito continuado contra la Hacienda Pública”. Según el fallo, los que durante años fueron los máximos responsables de la firma en España organizaron un sistema ficticio de exportación de CD para eludir el pago de 3,278 millones en concepto de IVA. La sentencia, del pasado 6 de marzo, considera que lo hicieron “por cuenta” de Verbatim “para conseguir beneficios que redundaron en la empresa, accionistas incluidos”. Por esto declara a la firma responsable civil y la condena a pagar los 3,278 millones si, como es previsible, no lo hacen los exdirectivos. Sin embargo, Verbatim ha liquidado su filial española por este caso y ahora importa el material desde Francia.
La sentencia llega siete años después de que la Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales (EGEDA) denunciara a la Guardia Civil que Verbatim, propiedad del Grupo Mitsubishi y líder en el mercado de CD y DVD, defraudaba a Hacienda y no pagaba el canon digital entonces vigente.
La multinacional ha tenido denuncias similares en Italia
La sección tercera de la Audiencia Nacional ha considerado probado que el entonces director comercial de Verbatim para España y Portugal, Luis Fisas Elizalde, y el exjefe de ventas, Álex Lozano Quer, “idearon un sistema para permitir la venta de los productos en España a un menor precio mediante la falta de ingreso de IVA”.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso este diario, simulaban ventas a Portugal, a sociedades sin actividad ni estructura –una de ellas estaba radicada en una “caseta rústica”-, en operaciones exentas de IVA. Luego la mercancía teóricamente volvía a España a otras sociedades también fantasma que cerraban antes de liquidar el IVA. Es lo que se conoce como fraude tipo carrusel.
Verbatim evitó así pagar 672.122 euros por IVA en 2005, 1,602 millones en 2006, 874.100 en 2007 y 129.919 en 2008. En total, la cifra defraudada asciende a 3,278 millones de euros. Verbatim también se libró así de pagar el canon digital entonces vigente, algo que EGEDA estimó que sumaba 89 millones de euros, aunque la sentencia finalmente no incluye como cantidad defraudada porque en el último momento ha excluido a EGEDA como acusación particular.
Simulaban ventas a Portugal para no pagar el IVA ni el canon digital entonces vigente
Por eso, Fisas Elizalde y Lozano Quer son condenados a tres años de prisión (pena que de ser confirmada por el Supremo conlleva el ingreso en prisión) por un “delito continuado contra la Hacienda Pública”. Fuentes jurídicas destacan la inclusión del tipo continuado, algo poco frecuente. Pero la Audiencia razona que “todos los partícipes han realizado una conducta abordada desde un plan preconcebido y la misma se reproduce cada anualidad” usando “sociedades instrumentales”, conocidas como truchas.
La Audiencia considera “casi absurdo” que ellos hayan alegado ignorancia y les absuelve del delito de colusión de mercado porque no está acreditado ni se han personado en la causa las empresas competidoras perjudicadas por esta estrategia de Verbatim, que le permitió en esos años copar el mercado. Además han sido condenados como cooperadores cuatro testaferros y directivos de sociedades pantalla.
Verbatim siempre culpó a sus exdirectivos y se distanció de su actuación. Sin embargo, la Audiencia Nacional “infiere que Verbatim estaba al corriente de las operaciones” y que “los acusados obtuvieron el visto bueno para actuar en interés de su empresa y en perjuicio de la Hacienda”. Por ello considera a la multinacional “responsable directo” para abonar la cantidad defraudada.
Un portavoz de la empresa sostuvo el jueves que “ni el grupo ni la matriz se han beneficiado de la trama y que "no hay responsabilidad civil distinta de la filial española, que dependía de los condenados”. Verbatim anunció que recurrirá porque no cree que haya delito, incluso si considera que lo ocurrido se ha hecho de espaldas a la firma. La fiscalía y la abogacía del Estado han recurrido al Supremo para elevar la pena.
El fallo concluye que el sistema se montó "en interés de la empresa"
El abogado de Fisas, Rafael Roca, se mostró en desacuerdo con el fallo y también recurrirá porque “Fisas no sabía nada”. Sí resaltó que las acusaciones de EGEDA de blanqueo y asociación ilícita y colusión de mercado han caído en el juicio. "Les pedían 20 años de cárcel y 100 millones de responsabilidad y hemos rebajado mucho pero si se confirma habrá ingreso en prisión y es una sentencia dura e injusta", añadió. Fisas, un hombre conocido en el sector, fue uno de los negociadores de la patronal tecnológica durante la creación del canon digital.
Pese a la condena, que el Estado vaya a cobrar es algo incierto incluso si es ratificada. En octubre de 2013 el juez que instruyó el caso, Eloy Velasco, dictó sobre Verbatim una fianza de 19,245 millones por si resultara condenada (la cantidad es mayor que la condena porque ahí sí incluía lo defraudado por el canon y su IVA). Solo un par de meses después, Verbatim cambió de nombre a V-Es Data for Life y presentó un concurso de acreedores. La Audiencia solo le había logrado embargar 1,4 millones. La fianza del juez fue causa de ese concurso, según admitió la empresa, y la compañía ya está en liquidación.
Aun así, en las tiendas españolas hay abundantes memorias y discos usb de Verbatim (el mercado ha cambiado durante la investigación y ya se venden muchos menos CD). Lo importa desde Francia y utiliza para ello la misma red comercial que tenía antes. Al menos dos de los antiguos vendedores de Verbatim España figuran ahora en Verbatim Francia, según constaba en su Linkedin, algo que cambiaron tras ser consultados por este diario.
Verbatim ha tenido problemas similares en otros países. Hace un año, la prensa italiana informó de una operación contra un fraude de tipo carrusel que suponía una evasión fiscal de 252 millones de euros con productos de Verbatim y hubo 16 detenidos.
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