El Gobierno esconde qué subida de pensiones ha presupuestado en 2014

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se ha negado a aclarar cuánto van a subir las pensiones el año que viene. O al menos qué subiba han utilizado para elaborar los presupuestos de 2014. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha habido dos preguntas directas sobre el asunto y una indirecta. Montoro las ha esquivado con circunloquios sin decir si subirán un 0,25%, como resultaría de aplicarse ya la fórmula que la reforma que se está tramitando, u otro porcentaje.

Para evitar dar el dato, Montoro ha tratado de desacreditar a todos los que dicen que con la reforma que está previsto que entre en vigor ya en 2014, los pensionistas perderán poder adquisitivo. “Esas previsiones fallan por la base”, afirma el responsable de Hacienda, basándose en que la inflación a partir de ahora va a ser mucho más baja de lo que lo ha sido hasta ahora (un 2,9% de media en los últimos años).

Pero a Montoro no le habían preguntado por eso. Las preguntas versaban sobre cuánto iban a subir las pensiones. En la primera ocasión, la cuestión fue directa. En la segunda, ante el circunloquio que ha dado en la primera, la pregunta ha sido: “¿Cuánto van a subir el gasto en prestaciones contributivas? Es para saber cuánto van a subir las pensiones”. Montoro ha seguido sin dar una respuesta clara. Ha emprendido el camino del circunloquio sin dar respuesta: "Como ha ocurrido todos los años, se ha hecho un programa estimativo de incremento de pensiones, pendiente de la aplicación de una ley que indiciaba las pensiones al IPC y había que esperar al IPC de noviembre. Es que siempre se ha programado así. No es una novedad y este año tenemos un paralelo una nueva ley que determinará la evolución de las pensiones en función de las circunstancias económicas del país", ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Estas palabras de Montoro son ciertas, lo que no dice el ministro es que en años anteriores el Gobierno informaba al presentar sus presupuestos, incluso antes, de qué subida iban a tener las pensiones a comienzos de enero. Por ejemplo, al presentar las cuentas de 2012 y 2013 se dijo que las prestaciones iban a subir un 1%. Luego en la tramitación parlamentaria ese dato podía cambiar, como sucedió con los presupuestos de 2013.

La evolución del gasto en pensiones crece año a año en función de tres variables: el crecimiento número de pensionistas (que el propio Montoro ha cifrado en un 4%), el aumento de la pensión media y la revalorización anual. Suele ser una de las partidas más fáciles de calcular del presupuesto, ya que los dos primeros componentes son muy estables y previsibles, y, por tanto, las desviaciones posibles suelen ser mínimas. El tercer componente depende de la decisión de quien elabora el presupuesto, así que resulta evidente que Montoro no ha querido despejar la incógnita.