Empleo todavía no ha cobrado por las prejubilaciones de firmas en beneficios
Han pasado más de dos años desde que se anunció la medida por primera vez El Ministerio de Empleo calculaba en 2012 que ingresaría unos 350 millones cada año
Ya hace más de dos años que un Gobierno, entonces del PSOE, prometió que las grandes empresas con beneficios pagarían el desempleo y las cotizaciones a la Seguridad Social por los despidos de mayores de 50 años, las llamadas prejubilaciones, que hicieran a través de un ERE. En ese tiempo se ha aprobado la norma, se ha modificado, el reglamento ha visto la luz y se ha vuelto a cambiar la ley. Y todo para que 25 meses después, ya con un Ejecutivo del PP, nadie haya pasado por caja todavía, admite el Ministerio de Empleo.
“Dadas las fechas y los trámites [...] no se pudo realizar ninguna liquidación en 2012”, admitía en abril el Ministerio de Empleo en una respuesta parlamentaria al grupo parlamentario Izquierda Plural. “Las primeras liquidaciones de estos ingresos [...] se realizarán a lo largo del presente ejercicio”, pronostica. Empleo argumenta que la demora llega porque los despidos de los ERE no se producen de golpe, sino que en la mayoría de casos son escalonados, y que hay casos en que la rescisión no llega hasta meses después. Añade también que el reglamento que tenía que regular el cobro no se cerró hasta octubre.
Nadie ha pagado todavía. Un ejemplo de esto es Telefónica, la primera que debía pasar por caja
“Lo determinante es que esto demuestra que unos y otros no han puesto en vereda a nadie, por mucho que lo pregonaran”, lamenta, Joan Coscubiela, de Izquierda Plural.
La obligación de que las empresas con más de 500 trabajadores pagaran el desempleo y las cotizaciones sociales de los despedidos de más de 50 años se estableció por primera vez en agosto de 2011. En julio del año pasado, aprovechando la reforma laboral, el Gobierno rebajó el tamaño de las empresas obligadas a pagar, fijó el umbral mínimo en 100 empleados. Solo faltaba un detalle para que las compañías pagaran: el reglamento que, entre otras cosas, indicara en qué ventanilla ingresar el dinero. Se aprobó en octubre de 2012, entonces el Ministerio de Empleo calculaba que ingresaría unos 350 millones cada año. Sin haber cobrado un euro, el Ejecutivo cambió las condiciones. Lo hizo en marzo, y con el argumento de ocasiones anteriores: dificultar las prejubilaciones y los despidos de los empleados más mayores. Con los cambios, que ya no exigen que la empresa esté en beneficios el año lleva adelante el despido colectivo, Empleo calculaba que ingresaría al año unos 390 millones.
Pero, de momento, nadie ha pagado. Un ejemplo de esto es Telefónica. Teóricamente la operadora es la primera empresa que tiene que pasar por caja, ya que precisamente el ERE que anunció en abril de 2011 fue el que provocó la medida (es conocida como Enmienda Telefónica). Pese a esto la operadora no ha hecho ningún pago, explica Empleo. La empresa, por su parte, afirma que si todavía no ha pagado es por todo el tiempo que ha tardado el ministerio en tenerlo todo a punto. Además, aclara que ya ha provisionado el dinero que tiene que pagar y que comenzará a hacerlo en las próximas semanas.
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