Los astilleros vuelven a las movilizaciones en su tercera jornada de paro
Mañana continúan las negociaciones entre Gobierno y sindicatos - La futura comisaria europea de Competencia, "flexible" con los plazos de devolución de las ayudas
Los trabajadores de los astilleros públicos secundan hoy una nueva jornada de huelga con el fin de exigir al Gobierno una salida favorable a la situación de Izar. Como en paros anteriores se producen movilizaciones en la calle como medida de presión y de protesta, mientras la SEPI mantiene su postura de la segregación porque "no hay una solución diferente". Desde Bruselas, la futura comisaria de Competencia, Neelie Kroes, ha abogado por ser "flexibles" en cuanto a los plazos de devolución de las ayudas a Izar declaradas ilegales.
En Cádiz, la plantilla de los tres centros de Izar en la Bahía han salido en manifestación desde sus centros de trabajo y, tras unirse en la capital, se dirigirán a la Subdelegación del Gobierno en una manifestación conjunta por la avenida principal de la ciudad, según fuentes de los comités de empresa de San Fernando, Puerto Real y Cádiz. Una vez en la Subdelegación del Gobierno leerán un manifiesto en defensa del futuro del sector naval.
También la planta de Sevilla está en la calle desde las 10 de la mañana. Al igual que la pasada semana, la factoría acordó en asamblea que el traslado de toda la plantilla hasta la zona centro de la capital en sus vehículos particulares, en una movilización "absolutamente pacífica", afirmó el presidente del Comité de Empresa, Ignacio Sánchez. La convocatoria viene acompañada, además, del inicio de un ciclo de charlas por los centros cívicos de la ciudad a cargo de los propios trabajadores de Izar para concienciar a los ciudadanos de su situación.
En Valencia, los trabajadores de Izar Manises se desplazaron desde el astillero hasta el aeropuerto de la ciudad valenciana, que permaneció ocupado por unas de 200 personas -unas 450, según los convocantes- y donde realizaron el paro de dos horas convocado por los sindicatos. Tras la concentración los manifestantes regresaron a la factoría, en una marcha en la que no tuvieron lugar incidentes destacables.
Por su parte, los trabajadores de La Naval de Sestao se manifiestan en la mañana de hoy en Bilbao, donde se concentrarán ante las sedes de diversas instituciones para reclamar garantías de continuidad del astillero. El comité de empresa ha decidido, además, enviar una carta a todos los partidos políticos, el Departamento de Industria del Gobierno vasco y el diputado general de Vizcaya para reclamar su apoyo. También pedirá una reunión con el lehendakari. Y en Galicia, las plantillas directa e indirecta de Izar Fene e Izar Ferrol realizarán un nuevo paro de dos horas de duración, que en el caso de los operarios del astillero ferrolano incluye otra salida a la calle. En Fene, la asamblea-paro comenzó a las diez de la mañana y concluirá con una concentración delante de la puerta principal de la factoría; mientras que en Ferrol la protesta en la calle tendrá lugar después de la asamblea, fijada para las diez y media de la mañana.
En Gijón cerca de 200 trabajadores de Izar participaron hoy en una marcha por las calles de la ciudad y provocaron atascos y retenciones de tráfico. La marcha, que salió del astillero pasadas las 10.30 horas y recorrió a pie varios kilómetros provocando cortes de tráfico en las principales avenidas, regresó a la factoría alrededor de las 12.30 horas , sin que se registraran incidentes de consideración con las Fuerzas de Seguridad. Los sindicatos anunciaron que endurecerán las movilizaciones si la SEPI no retira de la mesa de negociación la propuesta para segregar los astilleros civiles del grupo público, como respuesta a la crisis derivada de la obligación de devolver ayudas de la Unión Europea conseguidas de forma ilegal.
La segregación, única salida posible
Los astilleros también permanecerán cerrados el próximo jueves, aunque se espera que los actos que protagonicen los trabajadores sean de menos intensidad que los de las últimas días, tras el acuerdo alcanzado con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) el pasado jueves, en el que se aprobó un texto de cuatro puntos para fijar las líneas generales de negociación.
Dicho acuerdo establecía que acudirían juntos a la Comisión Europea para pedir que, mientras se esté negociando un plan para Izar, Bruselas no notifique la multa de más de 308 millones que tienen que pagar los astilleros. La Comisión ya ha afirmado que dará el plazo que sea necesario, aunque ha solicitado al Gobierno más información sobre la aplicación del plan. A propósito de éste asunto, la futura comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, ha dicho hoy mismo que será "flexible" en cuanto a los plazos de devolución de las ayudas a Izar declaradas ilegales, aunque ha querido subrayar que los astilleros europeos deben ser "competitivos" para evitar el riesgo de ser "eliminados".
Además, se acordó que la SEPI no tomaría decisiones unilaterales sobre el futuro de Izar, lo que los sindicatos interpretaron como una victoria en su estrategia de impedir la segregación de astilleros civiles y militares y la privatización de los primeros. Sin embargo, la SEPI ya ha adelantado que el Plan Industrial que presentará mañana a los sindicatos será el mismo que tenía preparado antes del acuerdo.
Ayer mismo su presidente, Enrique Martínez Robles, insistió durante una entrevista en que "el plan de segregación y privatización de los astilleros es el que mejor resuelve el problema. Aceptaríamos otro si se cumpliera el objetivo de salvar la actividad, pero no he oído una solución diferente". Martínez Robles lamentó que las únicas propuestas de solución pasaran por que "todo siga igual o que se negocie con la Unión Europea, algo que estamos haciendo". En cualquier caso, cree que un posible recurso "no tiene posibilidad de salir adelante". El Gobierno también mantiene su posición de que la segregación y la privatización es la única vía que puede impedir la quiebra de los astilleros y que es la mejor opción para garantizar empleo y actividad.
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