Los resultados definitivos de las elecciones de Túnez no se conocen aún -los parciales apuntan a una arrolladora victoria de los islamistas de En Nahda-, pero aún así empieza ya a configurarse la futura alianza que gobernará el primer país árabe en el que triunfó la revolución, hace ya algo más de nueve meses.
El desgobierno, la incapacidad palmaria para someter a las anárquicas brigadas de alguna ciudad libia, las pugnas territoriales, la división entre liberales e islamistas y el vacío político marcan el nacimiento de la nueva Libia, una vez enterrados ayer, en un lugar secreto en las profundidades del desierto, el dictador Muamar el Gadafi y su hijo Mutasim.
Catorce días de existencia y un terremoto. Así empieza Azra una vida. El milagro de este bebé que fue rescatado ayer con vida en la ciudad de Ercis, se ha convertido en la esperanza de todo un país. La imagen de la pequeña entre los brazos de una socorrista se retransmite cada hora en los telediarios de Turquía.
Amnistía Internacional (AI) acusó ayer al Gobierno sirio de torturar a heridos en los hospitales y aseguró que en algunos casos el propio personal médico y sanitario participa en los malos tratos. El Consejo Nacional Sirio, una organización opositora compuesta mayoritariamente por exiliados, ha pedido por su parte el envío a Siria de observadores internacionales.
Ante el peligro de que Irán trate de llenar el vacío que Estados Unidos va a dejar dentro de pocas semanas en Irak, la Administración norteamericana ha redoblado los esfuerzos para aislar internacionalmente al régimen islámico, que vuelve a aparecer como el principal enemigo exterior, por encima incluso de una devaluada Al Qaeda.
Es la primera vez que Arabia Saudí se enfrenta a la muerte de un príncipe heredero. Por primera vez también, existe el Consejo de Lealtad que creó el rey Abdalá para consultar a la familia sobre la sucesión. Sin embargo, todo apunta a que al fallecido Sultán va a reemplazarle su hermano Nayef, el poderoso y conservador ministro del Interior.
Cuando en el año 2000 los mexicanos expulsaron del poder, mediante las urnas, al Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernaba desde hacía ya siete décadas, muchos creyeron que la transición dejaría en la cuneta los lastres de un régimen anquilosado.
Mientras Nicolas Sarzoky se faja en Bruselas, y los electores franceses le dan la espalda en los sondeos, los incendios en su propia casa van tomando proporciones inquietantes. El partido del presidente, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), no deja de ser noticia por su desunión.
RICARDO MARTÍNEZ DE RITUERTO