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El ajuste sanitario

"Quieren quitarnos la sanidad pública"

Los vecinos ocupan un centro de salud que atendía a 40.000 habitantes

A las seis de la madrugada de ayer el centro sanitario de Badia del Vallès (Barcelona, 14.000 habitantes) amanecía plagado de esterillas, sacos de dormir, pancartas de protesta apoyadas en el suelo y una veintena de vecinos aún somnolientos. El ambulatorio, que prestaba consultas médicas y servicios sanitarios de urgencias a unos 40.000 usuarios de la zona durante 24 horas al día, cierra desde el mes pasado entre la medianoche y las ocho de la mañana. Y, hace ya ocho días, cuando los médicos abandonan el local, que decenas de vecinos y usuarios entran para ocuparlo y exigir su reapertura. Al menos una decena de municipios, en su mayoría de localidades medianas y pequeñas, llevan semanas protestando para exigir la reapertura del centenar de centros sanitarios que la Generalitat ha cerrado total o parcialmente este verano.

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Pero ese aparente cansancio desaparece cuando algún paciente mal informado se acerca por el centro, ya de madrugada y cerrado. "Les informamos de que el centro está cerrado y que deben dirigirse a Sabadell, a más de cinco kilómetros de distancia", señala otro vecino. En ocho noches han topado con una cuarentena de vecinos desorientados: desde ancianos con una simple fiebre a un bebé con problemas respiratorios severos que requirió la asistencia de una ambulancia.

"Las urgencias se inventaron para algo. La Generalitat no ha calibrado la repercusión que tienen estos recortes", protesta otro vecino doblemente enfadado: Badia es el municipio que registra la menor renta anual de Cataluña (11.900 euros al año) y una de las tasas de paro más elevadas de la comunidad. Cerca del 30% de población, por otra parte, supera los 70 años. "Siempre pringamos los mismos", protesta Javier Martínez, jubilado de 67 años, en la manifestación que los vecinos de Badia celebraron por la tarde. "Seguiremos protestando hasta que reabran el centro", insiste.

Los vecinos de Castellbisbal (Barcelona, 12.000 habitantes) también suman una docena de noches durmiendo en el respectivo centro sanitario con el apoyo del Ayuntamiento gobernado por CiU, el mismo partido que aplica los recortes. Cada vez son más los Consistorios que protestan por el cierre masivo de centros y apoyan protestas como las de Ripollet, Montcada, Castellar del Vallès y El Vendrell (Tarragona). En l'Hospitalet de Llobregat, un centenar de usuarios se encierran desde el pasado jueves en el ambulatorio del barrio de Sant Feliu, también cerrado por el tijeretazo del Gobierno catalán. El barrio, compuesto preferentemente por personas mayores con problemas para desplazarse, ha forzado que el pleno municipal de la localidad aprobara ayer una moción que exige a la Generalitat la reapertura del centro.

Encierro de usuarios del ambulatorio de Badia del Vallès, en la madrugada del martes.
Encierro de usuarios del ambulatorio de Badia del Vallès, en la madrugada del martes.TEJEDERAS

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