Juicio contra los Vargas, azote de las aseguradoras
Los hermanos Vargas fueron durante cuatro años un azote para las compañías aseguradoras. Manuel, Joaquín y Miguel diseñaron una ingeniosa trama de importación y venta de coches con la que obtuvieron casi un millón de euros cobrando indemnizaciones de forma ilegal. En 2008, la policía destapó el negocio de los Vargas, que ahora afrontan una petición de 11 años y seis meses de cárcel en un juicio en el que están implicadas otras 19 personas por beneficiarse de la estafa.
Los Vargas importaban vehículos de alta gama (BMW, Mercedes, Audi y Volkswagen) de Alemania apoyados por un colaborador local también implicado, Alexander Molnar. Una vez rematriculados en España, el propietario de una empresa de Vilanova dedicada a la compraventa de coches usados, Carlos Sauret, elaboraba falsos contratos. Los hermanos podían así concertar seguros con compañías que cubrieran los riesgos por incendio y robo, según considera probado la fiscalía.
A los pocos días, los coches aparecían en algún descampado, totalmente calcinados o desguazados. Los miembros de la banda que aparecían como propietarios presentaban entonces la correspondiente falsa denuncia ante los Mossos d'Esquadra y aguardaban tranquilamente a cobrar del seguro. Las indemnizaciones estafadas por todos ellos alcanzan, según el fiscal, 900.000 euros.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.